Debilidad de corto plazo por debajo de 37,31 euros.
En los mínimos del verano del 2012, en la zona de 11,46 euros, la cotización de BME desarrolla una pauta de giro alcista de doble mínimo, que se confirmaba con la ruptura de los 14,12, alcanzando, en un primer momento, los 15,28. Sin embargo, señales de sobrecompra dan paso a un rápido apoyo en los 13,27, para posteriormente continuar con la fase alcista hasta alcanzar 19,11 euros. Aunque, nuevamente el RSI genera señales de giro, derivando en una corrección negativa de medio plazo hasta 16,33.
Tras un doble apoyo en la zona de soporte, la cotizada supera con fuerza la resistencia de 18,55 euros, lo que permite desarrollar un nuevo trazado al alza, alcanzando en enero de 2014 máximos de 29,46 euros, coincidiendo con niveles elevados de sobrecompra. El rechazo de esta cota genera signos de agotamiento de corto, presentando soporte de 26,37, desde donde desarrolla una fase de mayor lateralidad. Fase que se mantiene hasta abril, donde se supera la resistencia previa, permitiendo un nuevo trazado al alza hasta 35,08, aunque tanto el RSI como el MACD muestran signos de giro.
La pérdida de soportes de corto deriva en una fase de máximos decrecientes que dirigen a la cotización de BME a marcar a mediados de octubre mínimos de 26,75 euros. Es precisamente desde esta zona donde el título vuelve a mostrar signos de giro alcista, superando los máximos relativos previos, lo que permite alcanzar máximos actuales de 39,95. Sin embargo, nuevos signos de elevada sobrecompra hace que sea necesario monitorizar soportes de corto como son los 37,31 euros, ya que por debajo de este nivel daría paso a una ruptura de la directriz alcista intermedia, generando signos de debilidad de corto.
Recomendación de trading: Vender por debajo de 37,31 euros, ya que esta situación confirmaría la pérdida de la directriz alcista y, con ello, una posible vuelta a niveles de 32,51 euros.
Vídeo: https://www.youtube.com/watch?v=Bym66tQKhnc
