Tras unos pocos millones de años, en el futuro, unos geólogos extraterrestres que llegaron a la Tierra, empezaron a estudiar las capas de la superficie terrestre para determinar qué fue lo que pudo haber causado la extinción masiva de animales y plantas en tierra y en el mar que se revelaba en los fósiles durante un periodo de 200 años del pasado del planeta. Por debajo de cierta capa se revelaba vida abundante y luego de ese periodo la riqueza biológica mermó considerablemente.
Ellos no sabían que una criatura llamada ser humano fue la responsable de la extinción, porque sus edificaciones no perduraron. Los humanos hacían sus edificios de cemento y hormigón de una calidad y durabilidad inferior al que usaban los romanos y antiguos egipcios para crear sus construcciones, y como todo estaba enterrado y no cavaron ni en Roma ni en El Cairo, y no daban con la causa del problema.
Ellos no encontraron rastros del dinero biodegradable en forma de billetes, ni tampoco rastros del dinero electrónico, pues aunque encontraron fósiles con la forma de discos duros y partes de computadoras, para entonces los dispositivos no existían sino que eran eran sólo polvo de óxido y material plástico orgánico degradado. El dinero eran simples señales magnéticas grabadas en los discos duros de los bancos. Es que los humanos hacían todo desechable y por eso la arqueología del futuro fracasó en encontrar rastros de civilización humana, pues las construcciones de las más grandes ciudades apenas duraron entre 100 y 500 años.
Los científicos extraterrestres expertos en bioxenotecnia no encontraron en el hombre la causa, porque era un animal frágil. No era fuerte, ni tenía dientes de carnívoro, como para haber sido el tiranosaurio de la época de los mamíferos. Encontraron yacimientos enormes de esqueletos de vaca, y en lugar de sospechar que se trataba de mataderos estadounidenses, pensaron que se trataba de una sequía, porque la tierra donde tienen a las vacas allá no tiene pasto, sino que les alimentaban con pienso de maíz como muestran en el documental FOOD Inc. Los bioxenotécnicos sospecharon que ante la sequía las vacas empezaron a comer maíz, que probablemente era más resistente, pero que creaba bacterias e-coli en las panzas de las vacas.
La teoría de la gran sequía se confirmaba pues encontraron que en tiempos de los humanos había menos plantas en las zonas donde se encontraban las ciudades, pero al no encontrar rastros de ciudades, pensaron el algún fenómeno climático. Encontraron rastros de dióxido de cabono en la atmósfera, pero no era el suficiente para explicar la extinción.
¿Acaso fue un meteoro? No encontraron rastros de iridio en el planeta. En su lugar encontraron rastros de basura con extrañas formas y componentes. Eran sustancias sintéticas que definitivamente no provenían del planeta, porque no se encontraban en estado natural en los millones de años anteriores. Toda esa basura se encontraba en una capa de apenas 100 años. ¿Cómo podría esa basura ser una pista de lo que ocurrió en el planeta? También encontraron rastros radioactivos de explosiones de reactores nucleares abandonados. ¿Podría la radiación haber sido la causa? Las explosiones tuvieron lugar pocos años después de la gran extinción cuando no había humanos.
Entre la basura encontraron rastros de sustancias tóxicas, y en el Antártico encontraron animales congelados, tomaron muestras del ADN e hicieron simulaciones genéticas para evaluar el efecto de las sustancias de la basura en los organismos y algunas sustancias se mostraron muy tóxicas. Pero las cantidades no eran suficientes para causar una gran extinción y destruir los habitats.
En todo caso la única manera de encontrar sustancias sintéticas sería por medio de la presencia de vida inteligente, pero el problema es que la vida inteligente no tira basura, pues en los miles de años de viajes espaciales todo el mundo entiende que abordo de una nave no se lleva basura porque es un desperdicio, pues todo es reciclable en los ecosistemas en ambiente cerrado de las naves espaciales. Si había basura no fue producida por ninguna raza conocida.
Vino un psíquico que usaba sus capacidades mentales para crear agujeros negros para ver lo que ocurría en otros tiempos. Encontró una cosa rarísima que nadie hubiera imaginado...
Resulta que esos débiles seres humanos tenían grupos de individuos llamados bancos y un sistema imaginario de supersticiones con una sustancia metafísica llamada dinero. Los bancos usaban el "sistema de reserva fraccional" para inventar dinero que se anotaba en libros contables, el cual era prestado a los demás individuos de la sociedad. Para devolver ese dinero, por medio de la esclavitud hacia esa sustancia metafísica, todos los demás debían trabajar para recibir dinero y poder pagar. Así los bancos inventaban dinero, lo prestaban y luego lo cobraban.
Pero como los bancos inventaban tanto dinero (pues la imaginación no tiene límites), los humanos debían trabajar tanto para producir cosas desechables y terminaron convirtiendo todos los ecosistemas en productos desechables por dinero, y al final extinguieron a muchos animales, y sin recursos para sostener su propia vida, los humanos se murieron, porque los bancos imaginaban tantísimo dinero y lo prestaban, que los recursos de la biosfera no alcanzaban para satisfacer a los voraces bancos, y así destruyeron la biosfera. Los bioxenotécnicos clasificaron a los humanos como un virus de baja inteligencia, y altísima virulencia y capacidad destructiva, y recomendaron su exterminio de encontrarse en otros planetas.
El psíquico indicó que de haberse exterminado a los seres humanos a tiempo para prevenir la gran extinción de animales y plantas, los humanos les habrían visto como "invasión extraterrestre" y habrían tratado de hacer la guerra a los fumigadores de humanos. El psíquico decía que los humanos eran una raza enferma que se hacía la víctima, que se rasgaba las vestiduras por los 100 ataques de tiburones al año, mientras que mataban 100 millones de tiburones al año, sólo para ganar el metafísico "dinero electrónico" que era una cosa imaginaria que no existía. En nombre de la sustancia metafísica destruyeron el ambiente en el que vivían y al final se murieron. Decía que era una suerte que existieran las investigaciones psíquicas espacio-temporales, porque de otro modo nadie hubiera podido adivinar la causa de tan misteriosa extinción masiva.
Los geólogos también encontraron rastros de otra extinción masiva millones de años atrás, en la frontera del Pérmico Triásico, que tampoco mostraba cráter de asteroide, ni construcciones humanas. ¿Podría haber sido otra era en la que los bancos extinguieron la vida en la Tierra? Era tiempo de llamar a los psíquicos de hoyos negros para resolver el misterio.