La Inteligencia Emocional nos puede ayudar a ver los problemas y situaciones desde una perspectiva fresca y así resolverlos para mejorar nuestras relaciones.
Practicarla Deliberadamente es la mejor forma para mejorarla.
Antes de decir o responder algo emocionalmente, piensa lo siguiente:
1. Necesita realmente ser dicho o es simplemente para desahogarme?
2. Necesita ser dicho por mí? Puedo canalizarlo con alguien más?
3. Necesita ser dicho ahora mismo? Es el mejor momento y lugar?