Fue más o menos a inicios de 2003 que me topé con un artículo de investopedia acerca de los mejores inversores del mundo. Lo leí rápidamente y tomé mis notas.
Honestamente no recuerdo cuál fue el proceso de razonamiento (o si en realidad hubo uno) que me llevó a palomear a George Soros y tachar a John Bogle. O incluso tachar también al abuelo Buffett (y hasta escribir mal su apellido) por tardar tanto en hacerse rico.
Para esa época ya llevaba unos 4 años “invirtiendo”[1], informándome y estudiando un poco al respecto. Lo había tomado como un entretenimiento al inicio, pero después de unos golpes de suerte pensé (como casi todos los novatos) que podía hacerme millonario muy fácil y rápido.
Le dedicaba muy poco tiempo, sabía muy poco, y sin embargo, me había ido super híper bien. Me creía un genio. Obviamente y visto en retrospectiva, había sido pura suerte y casi nada de habilidad.
Es por esta razón que tengo la hipótesis que una de las peores cosas que nos puede pasar cuando invertimos/especulamos por primera vez en Bolsa (o de hecho cuando comenzamos en casi cualquier ámbito) es iniciar ganando. Por qué? Porque nos confiamos e imaginamos cosas que no son, personalizamos el éxito y nos creemos invencibles.
Estaba tan enfocado en hacer algo similar a lo que Soros hizo con la libra y hacerme millonario de la noche a la mañana que cometí varios errores de muchos novatos:
- No leer la historia completa de cada Gran Inversor para darme cuenta que sus circunstancias y contexto fueron, eran y son muy diferentes al mío.
- Que ninguno se hizo millonario de la noche a la mañana sin esfuerzo, paciencia, disciplina y mucho estudio y leer.
- Que confundimos habilidad con suerte
- Que nos metemos en cosas que no entendemos bien
- Que somos arrogantes
- Que nos enfocamos demasiado en las ganancias, pero olvidamos los riesgos, la aleatoriedad y la probabilidad.
Hubiera cometido muchos más errores y por mucho más tiempo si no hubiera aceptado los consejos de mi tía (mi mentora) y mi padre. Al final los acepté un poco a la fuerza porque tuve una llamada de margen.
¡Nuevo curso!
Curso Indexación Pasiva
Aprende a crear una estrategia de inversión diversificada que a lo largo de la historia ha conseguido batir a la mayoría de gestores activos.
Entré un poco más en razón y comencé a leer mucho y a pedir consejos. Leí sobre Buffett, Templeton, Lynch, Fisher, más de Soros, Chanos, Icahn y muchos más. Entre ellos San John Bogle, pero aunque su filosofía era muy sólida y respaldada por estudios académicos y por la realidad, yo seguía pensando que yo era un genio y que aunque la mayoría debería tener una cartera indexada pasiva, yo no pertenecía a esa mayoría (Lake Wobegon o sesgo de superioridad).
Aun así, con mentor y todo, pasaron poco más de 10 años para que yo finalmente me diera cuenta que la inversión indexada pasiva es una de las mejores y más recomendables estrategias y filosofías de inversión no solo para la mayoría de personas, fondos de pensiones y fondos de fundaciones, sino también para mí, al menos es una proporción importante de mi cartera.
¿Cómo llegue a esa conclusión? Haciendo un estudio por mí mismo donde muestro (y me demuestro a mí mismo) que dos sencillos Fondos en RV pueden tener un mejor desempeño que las más de 80 mil combinaciones posibles entre diferentes fondos que siguen diferentes estrategias, países, regiones y factores.
Sí, yo también he cometido el error del párrafo anterior queriendo buscar ETFs sofisticados, novedosos y poco conocidos. También he cometido el error de tener demasiados en cartera, de hecho Margrave me dijo un día que mi cartera parecía el Arca de Noé, pero he rectificado. Lo bueno es que Bull Market de estos últimos años ha permitido que mis errores no costaran dinero porque casi todo ha subido. En algunas apuestas gané y en otras perdí y al final el resultado de mi cartera activa de Fondos y ETFs no ha sido demasiado diferente (apenas 300bps arriba sin contar impuestos) que si hubiera comprado un fondo indexado (tal vez inclinado a dividendos). Y eso que no estoy tomando en cuento todo el tiempo, estudio y esfuerzo que hice. La sobrediversificación siempre es dañina, pero es peor en los Fondos y ETFs que en las acciones, porque en los primero tenemos que pagar comisiones anuales.
Al igual que muchos, me perdía al inicio en detalles estéticos de mi cartera indexada pasiva pasando por alto cosas que de hecho ya sabía y que son más importantes:
- Entre más ahorre menos dependeré de los rendimientos del Mercado.
- Cuanto más pronto comience es mejor.
- No le tienes que atinar a todos los mejores activos y tener la asignación perfecta. Debes tener aquella que puedas soportar en los peores momentos y para el largo plazo.
La siguiente es mi Cartera Indexada Pasiva. El gusto se rompe en géneros. Yo al final me decidí por esta.