1)
La palabra Telematics. Esta industria podría llegar a valer 144mil millones de dólares para el 2030 y pocas veces se habla de ella.
Aunque quienes más las usan son los seguros, muchos Hedge Funds la utilizan desde hace años para ciertas estrategias.
Telematics es una combinación de localización con GPS, movimiento y análisis de datos que ayudan a mejores soluciones para monitorear, controlar y obtener datos más precisos.
Algunas acciones de esta industria son: MIXT, KE, KARO, HRI, FLT, DSGX, CAMP, SRI, SKM, MOTN
Fuente Imagen 1: https://www.alliedmarketresearch.com/commercial...
2)
Al inicio de la presentación el abuelo Buffett nos dio una cátedra explicándonos que encontrar las compañías que serán las ganadoras dentro de 20 o 30 años no es tan fácil como parece.
Además puso como ejemplo varias compañías de la industria automotriz que desaparecieron y solo tomó la letra M.
Esto me recordó a un Zoom que tuvimos a finales del 1er trimestre de este año donde mencioné algo similar: es difícil saber quiénes van a ser los ganadores en una industria de capital intensivo donde hay muchos competidores como lo es la automotriz. Y no solo eso, al ser una industria con altas tasas de cambio debido a la tecnología que están implementando y que implementarán, entonces no tiene mucho sentido descontar enormes crecimientos 10 o 15 años en el futuro para una sola compañía que está en una industria cuya tasa de cambio es mayor que la mayoría de otras industrias. En 10 o 15 años es bastante probable que otra compañía tome la batuta.
Aquí está parte del video de ese zoom.
3)
En algún momento de la plática Buffett y Munger comentaron que muchos de los problemas de Organizaciones se dan porque repiten y repiten mitos que llevan a enormes errores. Esto es algo que han mencionado recurrentemente durante décadas y me recordó a algo que escribí en 2014 gracias a sus enseñanzas y de otros como Kahneman y Slovic. Esto aplica no sólo para organizaciones y empresas, sino para todos en nuestra vida diaria:
No caer en el sesgo de Compromiso y Consistencia y aplicar lo que San Keynes bien nos enseñó: cuando los hechos/datos cambian yo cambio de opinión. Y es que nuestro cerebro está diseñado de tal forma que necesita consistencia y compromiso en todo lo que decimos y escribimos, no le gustan las contradicciones ni el desorden ni el caos ni la ambigüedad; todas esas cosas que componen el día a día del Universo. La consistencia y compromiso está bien para el trabajo, los deportes o relaciones personales, pero en todo lo referente a economía y finanzas es un estorbo, y de hecho es un estorbo en cualquier rama de las Ciencias.
Entre más veces expresemos una misma opinión, cada vez lo haremos con mayor ímpetu y convencimiento; y cada vez que lo hagamos con mayor ímpetu y convencimiento frente a más personas entonces más difícil será cambiar nuestra forma de pensar. Es como un hábito o un reflejo inconsciente. Esto no es algo exclusivo de ciertas personas, TODOS tenemos esta tendencia porque así fuimos programados desde hace miles de años; así que aquí no existe el “a mí nunca me ha pasado o a mí nunca me pasará o yo estoy arriba del promedio”.
El sesgo de evasión a la Inconsistencia como lo llama Munger, hace que comencemos a ver todo en términos y a favor de nuestra opinión (motivated thinking); comenzaremos a tomar anécdotas y casos particulares como evidencia generalizada (sesgo de representatividad); comenzaremos a creer o dar por demostrado algo simplemente dando ejemplos o metáforas (fallo de inducción); comenzaremos a buscar más información que soporte nuestra opinión y desecharemos el resto (sesgo de confirmación); comenzaremos a recordar únicamente aquello que refuerce nuestra opinión (disponibilidad heurística); comenzaremos a atar o a estimar los datos basándonos en nuestra opinión (anchoring bias); tendremos la tendencia a relacionar nuestra opinión con temas que creemos que sí entendemos y conocemos bien aunque en realidad no sea así (Dunning-Kruger effect); comenzaremos a ver nuestra opinión como la única manera de explicar las cosas (framing bias); comenzaremos a catalogar y encasillar al resto de las opiniones (pigeonhole bias); esto nos hará propensos a crear prejuicios contra esas opiniones, lo cual puede dar pie a que comencemos a hacer juicios de valor sobre lo demás sin conocerlos bien y basándonos únicamente en sus opiniones sobre un tema específico.
El primer principio es que no engañarte a ti mismo, ya que tú eres la persona más fácil de engañar., Richard Feynman (1974)
El Tema de los sesgos cognitivos y la psicología social es algo que me ha apasionado desde que comencé mi carrera.