Aparte del ahorro que no será muy grande, esta serie de ideas servirán para abrir la mente a posibilidades poco exploradas. La mente humana se complace en la rutina, y algunas veces, cambiando el ángulo de un enfoque, una idea trivial puede servir para cimentar otra estrategia más elaborada y sobre todo más lucrativa.
La mayoría de los SMS se usan para confirmar una cita o para dar un aviso de algo. Otros para decir “he llegado bien” o “ya salgo para casa, puedes poner el arroz”.
Estos mensajes y muchos más se pueden mandar totalmente gratis, y lo que es mejor todavía, sin tener que teclear en el incómodo teclado del móvil.
Otra ventaja añadida de esta nueva técnica de comunicaciones avanzadas gratuitas es que sirve tanto para SMS de móvil a móvil, como de móvil a fijo, de fijo a móvil, o de fijo a fijo.
Esto lo diseñé hace unos 12-14 años. Entonces no había Internet para ordenadores portátiles, y cada llamada al móvil costaba un pastón. Debido a mi afición a estar en la playa, cuando estaba operando con futuros no podía desplazarme y seguir controlando la situación. Ello me llevo a inventar los mensajes gratuitos.
Me dejaba en casa un ordenador conectado al mercado, que cada diez minutos me iba dando el precio de un futuro en tiempo real. De esa manera podía estar en la playa y seguir teniendo el control de la situación. Si tenía que operar lo hacia con una llamada de pago, pero saber las cotizaciones en tiempo real durante todo el día me salía gratis.
La comunicación funcionaba de la siguiente forma:
Imaginemos que quería saber el precio del futuro del eurosto50, y que había abierto a 2300 ese día.
Lo primero era sincronizar mi reloj con el del ordenador.
Luego hacía compartimentos de tiempo de diez minutos, cada diez minutos el ordenador me mandaría el precio exacto del futuro.
Como diez minutos suman un total de 600 segundos, esa era la cifra que podía decirme el ordenador. Entonces estipulaba un precio de referencia de 2000 puntos. El ordenador restaba del precio del eurosto50 el precio de referencia que yo había estipulado en 2000. Por ejemplo: si el índice estaba a 2240, la resta daba un resultado de 2240-2000=240, y esa información es la que me mandaba el ordenador al móvil. Cada segundo después de cada fracción de 10 minutos representaba un punto.
Cuando sonaba la llamada pérdida, sólo tenía que calcular cuantos segundos pasaban en ese momento de la última fracción de 10 minutos. Las fracciones eran: 11:00 – 11:10 – 11:20 – 11:30 – 11:40 -11:50 – 12, y las mismas fracciones cada hora.
Por ejemplo: si sonaba el móvil a las 11:02:25, habían pasado 145 segundos desde la última fracción, por tanto, el eurosto50 en ese momento estaba cotizando a 2145. La cotización se sacaba de sumar los 145 segundos al precio de referencia establecido para esa semana que era de 2000 puntos. La misma cotización hubiera sido si hubiera sonado a las 12:22:25
El ordenador cada segundo iba comprobando si el precio del eurosto50 menos 2000 era igual a la cantidad de segundos que habían transcurrido desde el último periodo estipulado en fracciones de diez minutos. Cuando coincidía me hacía una llamada perdida usando un MODEM de 1200 baudios (aquello si que era velocidad). Por tanto, cada diez minutos recibía información en tiempo real de la cotización del eurosto50. Como no descolgaba el móvil, la información llegaba totalmente gratis.
Mensajes de texto SMS
En caso de querer mandar mensajes de texto, lo ideal es haber confeccionado previamente una lista de mensajes numerados entre las personas que quieren comunicarse de esa manera.
Podríamos establecer el mismo periodo de 10 minutos, dividiendo cada minuto en cuatro partes de 15 segundos cada una. 10 minutos a cuatro mensajes diferentes cada minuto suponen una lista de 40 mensajes diferentes establecidos de antemano.
Por ejemplo:
Mensaje número 1: si suena el móvil entre las xx:x0:01 y xx:x0:15
Mensaje número 2: si suena el móvil entre las xx:x0:16 y xx:x0:30
Mensaje número 3: si suena el móvil entre las xx:x0:31 y xx:x0:45
Mensaje número 4: si suena el móvil entre las xx:x0:46 y xx:x0:00
La lista de mensajes establecidos entre dos personas podría ser:
Mensaje número 1: He llegado bien del viaje
Mensaje número 2: Ya he recogido al niño de la guardería
Mensaje número 3: Ya salgo hacia casa
Mensaje número 4: Besitos para los niños y abrazos para los mayores
Y así hasta 40 mensajes diferentes establecidos de antemano.
Se pueden confeccionar listas de mensajes con contenido para adultos con frases más picantes, la llamada sigue siendo gratuita.
También se puede hacer otra llamada perdida de vuelta para confirmar que se ha recibido y entendido el MENSAJE GRATUITO.