Tras un par de estudios que ofrecían unos datos que no guardaban coherencia con la realidad que conocemos, ni con los facilitados por organismos oficiales, me he puesto a rastrear los orígenes del caso y he llegado a un texto titulado “Las Sociedades No Financieras en España en la Crisis: Rentabilidad, Inversión y Endeudamiento” publicado por Vicente Salas-Fumás en mayo de 2014.
Debemos consultar su curriculum para entender la relevancia que se le da y el hecho de que este trabajo sea citado por varias vías; estamos ante todo un “Ph.D. en Management Science and Master of Science , Universidad de Purdue (Indiana, USA)” con master y licenciatura en ESADE. Pero, aparte, es Consejero General y Ejecutivo del Banco de España, vocal de Ibercaja, vocal del comité científico de la Fundación BBVA y presidente de la Fundación de Análisis Económico (que debe ser muy importante, pero no me sale en google).
A la vista de este currículum, me gustaría dejar caer la conveniencia de revisar las normas de compatibilidades e incompatibilidades. La intención del post no es esta, pero me parece necesario señalarlo. En realidad, la intención del post es comentar un trabajo que sirve de fuente para otros muchos.
El autor manifiesta:
En 2007, en la antesala de la crisis, el agregado de las SNF en España muestra niveles mínimos de beneficios y rentabilidad y niveles máximos de endeudamiento, acumulado durante años en los que las inversiones en activos operacionales y financieros son muy superiores a los recursos generados internamente. Durante los años de crisis, el agregado de SNF recupera beneficios y rentabilidad y reduce endeudamiento a través de aumentos en los márgenes (menor peso relativo de gastos de personal en valor añadido), menores gastos financieros e impuestos de sociedades, y severa contracción de la inversión. En 2013 la rentabilidad de los activos operativos invertidos en España alcanza niveles suficientes para anticipar una recuperación de la inversión compatible con el reequilibrio de la estructura financiera.
El informe acaba con las cautelas con las que se debe tomar la información:
Como punto final de la exposición creemos pertinente insistir en las cautelas con las que debe valorarse la información agregada contenida en este trabajo cuando la realidad empresarial presenta una gran heterogeneidad y en determinadas variables económico financieras el contenido informativo más relevante se encuentra en las colas de la distribución de los valores entre todas las empresas, no en los valores centrales.
El estudio nos muestra: “los datos más representativos de la cuenta de resultados y del balance agregados para el conjunto de sociedades no financieras (SNF) en España en el periodo 2006-2013” y ofrece conclusiones y datos un tanto sorprendentes: el importe de beneficios crece todos y cada uno de los años, los costes de financiación bajan, se incrementa la rentabilidad… y todo ello sin invertir.
No hace falta más que ver los datos que nos ofrece este estudio:
Pues este economista acaba demostrando que el conjunto de sociedades no financieras (es decir, las empresas que no sean bancos) han sufrido una crisis un tanto peculiar: ganaban 47.362 millones de euros en 2006; en ese momento se desplomaron, ya que, en 2007, ganaban 31.432 millones de euros. Supuestamente, en 2008, se desencadenó una crisis mundial que impactó en las cuentas de las empresas no financieras españolas que pasaron a ganar 96.439 millones de euros en el año 2013. Y sí: todo esto en España.
Si nos fijamos en el título del gráfico aparece entre los paréntesis “contabilidad nacional”, pero si miramos la parte de abajo comprobamos que, en realidad, se trata de un gráfico de elaboración propia a partir del informe de la central de balances del Banco de España del ejercicio 2012 y de una parte muy específica de la contabilidad nacional.
En realidad, lo que ha hecho es coger los datos de una parte del proceso de construcción del PIB (concretamente una parte de lo que le correspondería hacer al Banco de España); obviando todas las alarmas que existen al respecto; por ejemplo, el Banco de España escribe en la página 22 de la metodología de la central de balances lo siguiente:
La Central de Balances no dispone de una muestra de empresas que se haya diseñado mediante procedimientos estadísticos. Dado que la fuente de información principal de las empresas de mayor tamaño se basa en la colaboración voluntaria (esto es, la fuente CBA) y que los datos que se utilizan de la fuente CBB son exclusivamente los de las pymes (no se utiliza la información de las grandes empresas, salvo que estas pasen por los procesos de depuración de la base CBA), la integración de ambas fuentes, aunque ha atenuado los sesgos de las muestras, no impide que persistan algunos sesgos, que deben ser tomados en consideración por los analistas de los datos de la Central de Balances.
En concreto, el autor está combinando “algo” de la central de balances con el detalle de uno de los sectores institucionales de “las cuentas trimestrales (que no anuales) no financieras de los sectores institucionales” (se puede obtener el Excel en el apartado de sociedades no financieras que aparece en el enlace que he puesto). Digo que está combinando algo del informe de la central de balances porque sus datos se parecen a los publicados por la central de balances lo mismo que un huevo a una castaña. En la página 3 del análisis económico aparecen los datos:
Y si nos vamos a la bibliografía de la publicación tenemos lo siguiente:
En definitiva, que este autor ha cogido sus publicaciones, el informe de la central de balances de 2012 del Banco de España, un análisis estadístico sin publicar del impuesto sobre sociedades (sin que conozcamos las fechas), un estudio sobre la inversión de la fundación BBVA entre 1964 y 2011 y ha sacado un churro simpático. Dado que es consejero del Banco de España e integrante de la fundación de la fundación BBVA, podemos decir aquello de “todo queda en casa”.
Uno podía pensar que si quiere mirar aspectos de contabilidad nacional se puede ir a la página del INE. Si además quiere completar esta información estoy seguro de que puede buscar datos en la página de la agencia tributaria, Eurostat o alguna similar.
Pero resulta que no. Resulta que concluye la posición en la que están las empresas no financieras españolas en 2013 (que parece ser envidiable) en base a la información de la central de balances del Banco de España correspondiente a 2012.
Las limitaciones que puede tener la información recogida hasta 2012 pueden parecer bastante evidentes, tan sólo con mirar el folleto del Banco de España en el que describe la central de balances:
- La central de balances se refiere a una encuesta voluntaria a las empresas.
- Sólo pueden participar en la encuesta las sociedades con más de 100 empleados.
En definitiva, el estudio está recopilando la información facilitada en una encuesta voluntaria por casi 9.000 empresas que, además, cumplen unos determinados requisitos. ¿Puede ser representativo del total? Pues parece evidente que no.
Pero es que, además, no es posible entender que, en 2014, se confeccione el estudio dando por ciertos los datos de 2013 con los resultados de un informe de 2012 destinado a ofrecer previsiones.
Los razonamientos y explicaciones que se encuentran en las 38 páginas del documento van en línea con esto. Entiendo que desde la lógica no es fácil explicar que el conjunto de las empresas no financieras españolas se haya comportado así en una crisis.
En todo caso, recomiendo que no se utilice demasiado este estudio como base para otros estudios. Por lo menos, no para explicar España. Eso sí, para explicar el funcionamiento del Banco de España este artículo es perfecto.