Hoy os traigo una entrevista que me hizo bastante ilusión preparar y que publicamos en la 7ª edición de la Revista Buscando Valor, la revista para los amantes del Value Investing. La entrevista a Ipar.
Si quieres descargarte gratuitamente la revista puedes hacerlo a través de aquí:
Acceder a la última edición de la Revista Buscando Valor
Entrevista a Ipar
1. ¿Quién es Ipar?
Soy un inversor particular que invierte y gestiona su propio patrimonio y trata de pasar desapercibido disfrutando de dos críos pequeños y las pequeñas aficiones que siempre me han llenado (cine, montaña y escritura) . Empecé a invertir en mis años universitarios, con tan buen ojo clínico que vendí mis heredadas ELE para dejarme llevar por los cantos de sirena de Telefónica Móviles. Estudiábamos en la Facultad de Económicas y Empresariales de la UPV (Sarriko) y creíamos que éramos los más listos del mundo. La cura de humildad que me dio las malvendidas TEM supongo que fueron el mejor máster de inversión que he recibido jamás. No quise saber nada más de acciones o Bolsa en mucho tiempo. Recuerdo como un buen amigo de aquellos años perdió los ahorros familiares dejándose arrastrar por Terra.
En Sarriko participé activamente del movimiento asociativo “Junior Empresa” a nivel nacional y fundé varias revistas y periódicos universitarios. Aprovechamos la incipiente implantación de Internet (en los hogares apenas había y en los móviles era aún impensable) para desarrollar varios proyectos de contenidos (cine, fantasía medieval…). Trataba de compaginar los que estudiaba (empresariales) con lo que me apasionaba (escribir).
Empecé a trabajar en televisión como becario vinculado a la producción. El hecho de haber ganado varios premios literarios empujó a mis responsables a animarme a reciclarme en redactor, presentador y guionista de programas. He sido coordinador de guiones y director de programas para EITB, LA SEXTA o TVE.
Hace doce años dejé la televisión para formar una familia en Bilbao, donde resido. Sigo escribiendo (recientemente terminé un libro de Historia adaptado a los niños). Y desde hace ya cuatro años formo parte de una extensa comunidad financiera en Twitter bajo el nombre de Ipar (que es mi apodo de toda la vida: significa en euskera “norte”, pues de crío en la montaña era el encargado de orientación y mapas).
2. ¿Cuándo comenzó tu interés por la inversión y qué te hizo dar el paso para invertir?
Tras abandonar el mundo audiovisual, me encuentro con unos ahorros a los que les quiero sacar provecho. Ni se me pasó por la cabeza volver a invertir en Bolsa. Así que fui a una sucursal bancaria donde el comercial no tuvo demasiado problema para endosarme un fondo “garantizado” a tres años, vinculado a renta variable donde si tres bluechips conseguían unos determinados objetivos yo recibiría una buena cantidad. Aquello sonaba bien y yo era crédulo aunque hubiese sonado mal y no le hubiese entendido ni un solo tecnicismo. Así que le confié esos tres años mis ahorros. Tres años después volví y para mi sorpresa me devolvió lo mismo que le había entregado.
- Pues aquí tiene, tal cual se lo volvemos a ingresar en cuenta. Mírelo por el lado bueno. Usted no ha perdido dinero.
- Oiga. Que han pasado tres años y me devuelve el mismo dinero…
- Por eso, por eso mismo… GA-RAN-TI-ZA-DO… ¡Y menos mal! Hay una crisis muy gorda subprime, menos mal que usted sí que sabe proteger su dinero… ¡Qué le voy a contar! ¡Todo bajando! ¿No ve usted la tele?
Se pueden imaginar el cabreo que tenía. Y ni siquiera me habían dado un bolígrafo. Tres años mi dinero parado para nada con el consiguiente Coste de Oportunidad. Había sido un pardillo, y encima creía que era más zorro que los jubilados de la cola porque a mí, a mí sí, me perdonaban las comisiones.
En ese momento supongo que se me encendió la bombilla. Y me vino a la cabeza la experiencia con Telefónica Móviles de mis años universitarios. Miré las cotizaciones, SANTANDER a 5,25 ¡Qué barata! En la uni hace un porrón valía 6,30 ¡¡¡¡No puede salir mal!!! Cancelé mi cuenta con esa sucursal y abrí los brazos para abrirme la cuenta con el SAN.
-
Muy bien, al ser acciones propias, y ser más de 500 no le vamos a cobrar nada.
-
¡Qué bien!
-
¿Quiere un plan de pensiones? ¿Tiene usted seguro de hogar?
-
Ehhh… No, no… primero la cuenta para las acciones…
Y allí iba yo, era un 23/1/2009. Ese mismo año compraba algunas Iberdrolas. Era el rey de la barraca. Emilio Botín velaba por nuestros intereses y para que no pagásemos más a Hacienda desarrollaba la fórmula del “Scriptdividend”.
-
Lo que te digo, así no pagas a Hacienda.
-
No lo acabo de ver claro, ¿pero no se están imprimiendo demasiadas acciones?
-
¡Nada! Mejor para usted, cuando suba, doble ganancia.
Guiado por el sesgo de confirmación y la ceguera, no me di cuenta que me estaba pagando los dividendos con mi propio dinero. Mi inversión subiría el año siguiente a 9 euros… para entrar en caída hasta hoy.
Cambiaría mi estilo de inversión… empezaría a formarme y sobretodo leería para aprender de los errores que otros ya habían cometido.
3. ¿Qué personas o autores te han influido más desde que comenzaste a interesarte por el mundo de la bolsa?
Por paradójico que parezca, en la facultad no recibimos formación bursátil alguna. Frecuentaba en la universidad el Club de Bolsa (cuya orientación era totalmente especulativa) y no me perdía los seminarios organizados por distintos fondos de inversión (generalmente de captación y siempre de análisis técnico). Un punto y aparte fue descubrir Rankia en su momento, antes de registrarme era un asiduo de blogs tan imprescindibles como “Osos, toros y borricos” de Pepe Díez (Rebuzner) a quien he vuelto a contactar vía Twitter. Ha sido gracias a Twitter por quien he contactado con gente con enorme talento. Es una herramienta que, bien usada puede amplificar la formación.
Pero los libros han sido los grandes mentores. Queda muy bien citar a los grandes autores, pero la gran verdad es que el primer libro que me hizo plantearme las cosas fue “Padre Rico, Padre Pobre” de Kiyosaky, un día de lluvia en el que iba con el carro del crío y me resguardé del aguacero en el FNAC. Tal cual. Hubiese pasado de largo. Pero me llamó la atención aquella edición de bolsillo en su característico color violeta. Se juntó todo; lluvia, formato llamativo, título sugerente y un bebé con ganas de ensanchar los pulmones. Me llevé aquel libro a casa. Sentaría las bases sobretodo del ciclo del flujo del dinero. Una vez visto, todo el mundo listo. Hoy de ese libro quitaría cosas. Pero sería injusto que renegase de él.
En segundo lugar citaría “Un paso por delante de Wall Street” de Peter Lynch. Es ameno, es pedagógico y es real. Lynch no se descuelga con grandes máximas. Hace que pasear por un supermercado se convierta en un ejercicio de inversión en que los imponderables son valorados por tu familia.
En tercer lugar, y no menos importante, “Los cuatro pilares de la inversión” de Bernstein. Todo el abanico de inversión está ahí y está escrito de una manera muy líquida y fácil de entender. Creo que debería ser libro de texto. Ahorraría muchos problemas a las generaciones venideras de quien se desdeña la educación financiera.
Hay más autores (Kostolany, Bogle, Greenblatt, Robbins, Pabrai, Taleb, Siegel, Fisher, Dorsey…). Me hace gracia cuando se cita “El inversor inteligente” de Graham, pues estoy convencido de que le pasa como a la edición de Minotauro de “El Señor de Los Anillos”, que luce en las estanterías y las fotos y nunca ha sido acabado. Leer es experimentar en un terreno seguro los fallos que otros ya han cometido.
4. ¿Qué significa para ti el Value Investing? ¿Cómo definirías tu estilo de inversión?
Ser value se aproximaría a comprar una acción de una empresa a la que el ciclo o una eventualidad le ha dado la espalda manteniendo sus fundamentales más o menos intactos. Yo creo que hemos llegado a un momento en que value o Value Investing es más una etiqueta de marketing que un estilo de inversión. ¿Quién no querría invertir en valor? ¿Acaso hay alguien que quiere mantener en su cartera bombas de relojería?
Etiquetarse en un estilo de inversión creo que es un error. Y lo digo partiendo de la base de que toda la Comunidad Financiera pretende invertir en valor (con mayor o menor fortuna). Cuando se dice “yo soy dgi”, “yo compounder”, “yo value” al final creo sinceramente que es una superposición de diagramas de Venn con constantes intersecciones. Y es en esas intersecciones donde los inversores nos acabamos reconociendo.
¿Qué estilo tengo yo? Yo soy un inversor que trata inútilmente de equivocarse lo menos posible. Acumulo en estos momentos en nueve valores del mercado continuo. Reinivierto mis dividendos y las aportaciones cuando el PMC es rebasado a la baja por la cotización. Intento mejorar con esa disciplina el margen de seguridad (por criterio FIFO me deshago de las posiciones más altas con las que me siento incómodo).
¿Es ser eso value? No lo sé. No lo creo. Es fluir y adaptarte.
5. ¿Cuáles son tus objetivos de inversión?
El objetivo de cualquier bróker es que usted sea una suerte de Gordon Gekko comprando y vendiendo constantemente. Ahí reside su negocio, pero no el de usted. Ya que lo haga bien, o lo haga mal, usted pasará por caja. Yo acumulo la liquidez y trato de aprovechar los momentos en que las acciones de mi cartera lo hacen peor. Acumulo comprando en contra del ciclo cuando tu cabeza te dice que eso no es una buena idea.
Mi objetivo no es superar ningún índice. Mi objetivo es incrementar mi patrimonio. Aquello que dicen de parecer siempre un tonto hasta que el mercado te acaba dando la razón. No vivo de mis inversiones. Mis inversiones son el Plan B. Un día, y puede que ese día nunca llegue, descubriré ese plan B para utilizarlo. Hasta entonces no necesito monetizar blogs, podcast, o tirar de mi cartera.
6. ¿Qué activos forman parte de tu cartera de inversión?
Actualmente trabajo exclusivamente con RV española. Nueve valores de distintos sectores que proporcionan un flujo de efectivo que es reinvertido cuando se presenta una oportunidad que está en mis parámetros. ENAGÁS, RED ELÉCTRICA, GESTAMP, PRIM, VISCOFAN, SANTANDER, IBERDROLA, EBRO y LINGOTES ESPECIALES. Esa bolsa de liquidez es exclusiva para ese menester y también se nutre de aportaciones mensuales. El proceso lo he automatizado y trato de olvidarme de ello dejando que crezca. No parametrizo porcentajes de liquidez en mi cartera, pues puedo estar prácticamente un año sin invertir y otro año haciendo entradas constantes en un solo mes. En todo caso, mis movimientos son públicos en mi perfil en tiempo real. Tanto dinero a tal valor. Muestro lo que hago, pero me cuido mucho de recomendar nada a nadie.
7. ¿Cuáles son tus mayores posiciones en la actualidad? ¿Podrías resumirnos tu tesis de inversión en alguna de tus mayores posiciones?
Mis mayores posiciones son ENAGÁS y GESTAMP. En las redes sociales a veces puedo parecer un fanboy de GESTAMP (en contra de lo que tantas veces digo de no enamorarse de una acción). Creo firmemente que es una acción -con algunas dudas en su deuda- pero a la que el ciclo castiga en exceso. He sido coherente con el planteamiento y he acumulado en el valor. ¿Nos equivocamos? Tiene un envidiable posicionamiento como industria TIER1, invierte constantemente en I+D, y las motorizaciones no afectarían a su modelo de negocio (la caída de ventas de las automovilísticas por su reconversión hoy es debilidad y mañana fortaleza).
No soy tan optimista como Iván Martín de Magallanes en la Iberian Value, pero sí creo que será un buen pilar de la cartera cuando despeje las dudas sobre su deuda.
8. ¿Cuáles son tus criterios determinantes para entrar y salir de una empresa?
Reinvierto en un valor cuando es afectado por valores exógenos que no cambian sus fundamentales. Y esa entrada trato de hacerla siempre por debajo del PMC para aumentar el margen de seguridad. Vendo un valor si se han deteriorado sus fundamentales o si no estoy cómodo -por FIFO- con la entrada más alta. En mi cartera rara vez vendo.
9. ¿Cuáles dirías que han sido tus mayores errores desde que comenzaste a invertir? ¿Qué le recomendarías a alguien que quiere comenzar a invertir?
La frase “no puede caer más” o “esta vez es diferente” han hecho un daño enorme en algunos patrimonios. A eso le uniría el “¿pero cómo va a caer esta empresa?” o “el script dividend (sin amortización de acciones) es un chollo porque pago menos a Hacienda”. Mi mayor error fue empezar a invertir guiado únicamente por la variable precio y por los cantos de sirena de acciones que descontaban dividendos a costa de la propia cotización, destruyendo valor para el accionista. Y sí, el precio es un increíble contenedor de información, pero regirse únicamente por el precio de una acción es pegarse un tiro en los pies. Fíjese, Telefónica en estos momentos está “muy barata”, ¿no? ¿Usted la compraría?
10. ¿Qué son los #iparfilms?
Como he comentado antes, siempre he tenido una enorme afición por la escritura y por el cine. Trasladar esa afición a la redes sociales uniéndolo a la Bolsa creo que fue un acierto. Los #iparfilms son hilos en los que desarrollo una idea (estilos de inversión, vendedores de humo, chicharros, sesgos cognitivos…) de la manera menos “plomo” posible. Y lo hago mediante fragmentos de películas que edito y posteo.
Los #iparfilms que desarrollo en Twitter han tenido muy buena acogida. No pretendo con ellos otra cosa que no sea pasar un buen rato y reírnos de nosotros mismos como inversores. Eso es para mí lo que debería ser esta formidable herramienta que es Twitter: un foro para aprender y compartir modelos de inversión y formas distintas de hacer las cosas. Algo vivo.
11. ¿Te gustaría poder gestionar algún día tu propio fondo de inversión? Si hoy te diesen la posibilidad de comenzar con tu fondo… ¿Qué características tendría? ¿Es cierto que las cartas trimestrales vendrían en formato #iparfilm?
Sería estupendo porque significaría que las cosas se están haciendo bien. Ahí están los ejemplos de amigos como @antonioRRico, @ValueBilbao, @alex_estebaranz, @foso_defensivo, @masdividendos… Pero no, no tengo esa aspiración. Gestiono mi propio patrimonio con mis numerosos errores y algún acierto. Sí que es verdad que me marco una disciplina y mensualmente mando una memoria en una lista privada de distribución explicando a un grupo de personas que me han acompañado estos años los movimientos realizados. Esa lista- “Bolsa Padawans”- comenzó en octubre de 2015 y mensualmente me ha servido como “hoja de ruta” y chequeador de los éxitos y fracasos cometidos. No tiene estructura de un iparfilms, pero sí que es verdad que suelo hacer una introducción histórica para unirlo a lo realizado en el mes. Por ejemplo, febrero empecé con la toma de Tiro por Alejandro Magno para unirlo a la inestabilidad que provocaba la volatilidad subyacente actual del Coronavirus y las compras realizadas en el mes.
Escribir marca una disciplina. Y escribir, intentando compartir lo que haces, establece una muy positiva relación biyectiva en la que ambos podemos enriquecernos aprendiendo. Me considero un auténtico privilegiado compartiendo el camino de gestores, traders, aficionados, particulares y jóvenes de habla hispana. Es un auténtico privilegio y un verdadero regalo.
PD: Próximamente saldrá la nueva edición de la Revista Buscando Valor... Puedes descargar aquí la Última Edición de la Revista y recibirás gratuitamente en tu correo la nueva edición en cuanto se publique.