De tanto leer novedades relacionadas con Internet en los feeds a los que estoy suscrito tiendo a olvidar lo más importante. La fuerza de Internet es la fuerza de las personas que se conectan a través de este tecnología. Toda la magia y toda la capacidad de transformación que tiene este nuevo medio se debe a que personas que se encuentran en los lugares más diversos del planeta pueden compartir sus ideas, sentimientos y conocimientos a través de un ordenador o un dispositivo móvil.
Parafraseando aquel famoso mensaje del asesor de Clinton en la campaña presidencial de 1992, ¡son las personas, estúpido! La tecnología está siempre en un segundo plano, aunque los que participamos en proyectos en Internet y estamos suscritos a un montón de blogs tendamos a sobrevalorar lo nuevo y lo cool.
Recuerdo que cuando empezamos a concebir Verema.com en la primavera del año 2000 comunidades como Photo.net y Craiglist fueron nuestro referente. No tenían nada cool pero funcionaban perfectamente. Si las vemos ahora, seis años más tarde, prácticamente no han cambiado nada en su esencia (y Craiglist tampoco en su apariencia). Sólo tienen muchos más usuarios participando en la comunidad.
Prometo, por tanto, jugar menos a ser aprendiz de gurú en este blog y transmitir más mis experiencias personales en el desarrollo de comunidades online y en la lucha por mejorar la productividad digital, ese gran desafio diario que tenemos todos los que pasamos muchas horas delante de un ordenador.
Y todo este rollo viene a cuento de un vídeo que me ha emocionado (descubierto vía Pablo Moreno). Se trata del vídeo del Desafío CPI (Curioso pero Inútil, aunque de inútil no tiene nada), inspirado en los vídeos de bailoteo viajero de Matt Harding. Al parecer, a Ricardo Gallí también le ha emocionado. Aunque el vídeo de Matt tiene más calidad técnica el vídeo del Desafío CPI me ha parecido más humano porque participan en él muchas más personas. Esa evolución, de un video brillante pero individual, a un video colectivo me parece la perfecta analogía de lo que ha sido la evolución del ordenador personal a la World Wide Web.
Al verlo me ha recordado esa filosofía original del Manifiesto ClueTrain que nos inspiró hace unos años: Los mercados son conversaciones. Los mercados consisten de seres humanos. Las conversaciones entre seres humanos suenan humanas... La mejor forma de entender esto es ver y disfrutar con la música del vídeo CPI. Te conecta con el mundo y te humaniza. No os lo perdáis.