Una "large cap" es una empresa cotizada cuya capitalización bursátil se considera de tamaño grande en relación con otras empresas cotizadas en el mercado. En función de la capitalización bursátil, tenemos las "small cap", las "mid cap" y las "large cap". Las large caps son las empresas más grandes y establecidas en términos de capitalización bursátil.
Cuando hablamos de invertir en la
bolsa de valores, es común escuchar el término "large cap". Esta expresión, que proviene del inglés "large market capitalization", se refiere a empresas con una gran
capitalización de mercado, es decir, cuyo valor en bolsa es muy elevado. Por lo general, se considera que una empresa es una "gran capitalización" cuando su capitalización bursátil supera los 10.000 millones de dólares, aunque esta cifra puede variar dependiendo de la fuente.
Imagina que el universo de la
bolsa es un gran océano lleno de diferentes tipos de peces.
Los peces más grandes y conocidos, como podrían ser las ballenas y las orcas, representan a las empresas más grandes y populares, las que nos ocupan en este artículo, las llamadas "large cap". Por otro lado, otros peces de tamaño mediano, como los tiburones o las rayas, representarían a aquellas empresas de capitalización media, o lo que conocemos como empresas "
mid cap". Y, por último, tenemos otro tipo de peces, los más pequeños del mar, que en bolsa representan a las empresas de capitalización más baja, o lo que conocemos como "
small cap".
Estas empresas, es decir, las large caps suelen ser compañías reconocidas a nivel mundial, las grandes multinacionales que todos conocemos. Cuando hablamos de large caps, hablamos de compañías como Google, Microsoft, Apple, Amazon, o en España, el Banco Santander o Telefónica. Este tipo de empresas suelen tener una presencia global, operar en múltiples
mercados y tener una gran cantidad de empleados.
Las "large caps" son a menudo la columna vertebral de muchos
índices bursátiles, como el Dow Jones Industrial Average o el S&P 500 en Estados Unidos, o el Ibex 35 en España. Estos índices son seguidos de cerca por los
inversores de todo el mundo, ya que su
rendimiento suele ser un
indicador económico clave del estado de la
economía.
Uno de los aspectos más interesantes de las "large caps" es su estabilidad relativa. Al ser empresas de gran tamaño y con una fuerte presencia en el mercado, suelen ser más resistentes a las fluctuaciones económicas que las empresas más pequeñas. Esto no significa que sean inmunes a las
crisis, a las
recesiones o a las fluctuaciones del mercado, pero su tamaño y su
diversificación suelen proporcionarles una cierta protección.
Por otro lado, debido a su gran tamaño, las "large caps" pueden tener dificultades para crecer a un ritmo rápido. Una empresa que ya tiene un gran
poder de mercado puede encontrar dificultades a la hora de de querer seguir creciendo al mismo ritmo que en sus primeros años. Por lo tanto, aunque la inversión en "large caps" puede ser menos
volátil y más segura, el potencial de crecimiento puede ser menor que en las empresas más pequeñas.
Por último, es importante señalar que las "large caps" suelen ser compañías populares entre los inversores que buscan
ingresos estables, ya que muchas de estas empresas pagan
dividendos de forma regular. Un dividendo es una parte de los beneficios de una empresa que se reparte entre los
accionistas. Esto puede proporcionar a los inversores una
fuente de ingresos regulares, además de la posibilidad de ganancia de capital si el
precio de las
acciones aumenta.
Características de las large cap
A continuación, vamos a profundizar en las características de las large cap.
En primer lugar, las large caps son empresas cuyo valor total en bolsa, o capitalización bursátil, es elevado, situándose normalmente por encima de los 10.000 millones de euros. Esta cifra puede variar según las fuentes, pero es un umbral aceptado de forma generalizada.
Este tipo de empresas son grandes gigantes de la economía que normalmente no resultan muy familiares: estamos hablando de nombres como Telefónica, Inditex, Iberdrola o el Banco Santander en España; y Apple, Amazon, Microsoft o Google en el ámbito internacional. Estas empresas suelen tener una influencia significativa en su sector, o incluso en la economía global, y operan en múltiples mercados alrededor del mundo.
Una característica clave de las large cap es su relativa estabilidad. Al ser empresas con un gran volumen de negocio y una fuerte presencia en el mercado, están en mejor posición para resistir fluctuaciones económicas que empresas de menor tamaño. Es importante aclarar que esto no las hace inmunes a las crisis oa los vaivenes del mercado, pero su tamaño y su diversificación las hacen, en general, menos volátiles.
Por otro lado, las large caps suelen ser empresas maduras. Esto significa que han pasado la etapa de crecimiento acelerado que caracteriza a las empresas más jóvenes y, en general, su crecimiento es más lento. Sin embargo, en términos absolutos, estos incrementos pueden ser muy significativos dada su ya elevada base de capitalización.
Las large cap son, además, muy apreciadas por los inversores que buscan ingresos regulares, ya que suelen repartir parte de sus beneficios en forma de dividendos a sus accionistas. Esto puede ofrecer una rentabilidad constante, independiente de las oscilaciones del precio de la acción en el mercado.
Por último, las large caps suelen tener una gran liquidez. Esto significa que hay un gran volumen de acciones de estas empresas siendo compradas y vendidas en el mercado. Esta liquidez facilita la compra y venta de estas acciones y reduce el riesgo de no encontrar contraparte cuando queremos realizar alguna de estas operaciones.
¿Cómo y dónde cotizan las large cap?
Continuando con nuestro recorrido por la bolsa de valores y las large caps, debemos entender cómo y dónde cotizan este tipo de compañías. Como mencionamos antes, se trata de grandes corporaciones cuyo valor total en el mercado de valores es muy alto, por lo que las encontramos presentes en las principales bolsas del mundo.
Las large cap cotizan en las principales bolsas de valores del mundo, debido a su tamaño y relevancia en el mercado. En el caso de España, encontraremos a estas empresas en la Bolsa de Madrid, que es parte de las cuatro que forman el mercado de valores español, junto a Barcelona, Bilbao y Valencia. A nivel global, destacan grandes bolsas como la de Nueva York (NYSE), el NASDAQ en Estados Unidos, la de Londres (LSE), la Bolsa de Frankfurt en Alemania, o la de Tokio en Japón, entre otras. En estas bolsas se listan empresas de todo el mundo, y es común que las grandes corporaciones coticen en varias de ellas a la vez.
La cotización de estas empresas se rige por el juego de la oferta y la demanda. Los inversores compran y venden acciones de estas empresas y, dependiendo del número de compradores y vendedores, el precio de las acciones puede subir o bajar. Las empresas de gran capitalización, por su gran tamaño, suelen tener un gran número de acciones en circulación, lo que genera un alto volumen de negociación y una alta liquidez. Esto último significa que es relativamente fácil comprar o vender acciones de estas empresas, ya que siempre hay un gran número de inversores decididos a negociar.
Por último, para invertir en estas empresas, los inversores pueden acudir a un corredor de bolsa o a una plataforma de trading online. A través de estas plataformas, los inversores pueden acceder al mercado de valores y comprar o vender acciones de las empresas que les interesen. Es importante destacar que, aunque las large cap suelen ser menos volátiles que las empresas más pequeñas, invertir en la bolsa siempre conlleva riesgos y es crucial informarse bien antes de tomar decisiones de inversión.
Ventajas y desventajas de las large cap
Siguiendo con el tema, es relevante que comprendamos las ventajas y desventajas que puede conllevar la inversión en empresas de gran capitalización.
Ventajas de invertir en una large cap
Las ventajas de invertir en large caps son variadas. Una de las más destacables es la estabilidad. Las large caps suelen ser empresas establecidas, con modelos de negocio probados y un historial de rentabilidad. Esto puede traducirse en menos volatilidad en los precios de sus acciones en comparación con las empresas de menor tamaño, las mid y las small cap. Además, por su envergadura, estas empresas suelen tener un mayor acceso a recursos financieros y suelen estar más diversificadas, lo que puede ayudarles a resistir mejor los períodos de incertidumbre económica.
Otro aspecto a destacar es la liquidez. Como mencionamos antes, las acciones de las grandes mayúsculas suelen ser más líquidas, lo que significa que se pueden comprar y vender con relativa facilidad sin afectar mucho a su precio. Además, estas empresas suelen pagar dividendos de manera más regular, lo cual puede ser una fuente atractiva de ingresos pasivos para los inversores.
Desventajas de invertir en una large cap
En cuanto a las desventajas, una de ellas es que el potencial de crecimiento puede ser menor en comparación con las empresas más pequeñas. Las large caps ya son empresas maduras y aunque suelen crecer de manera constante, es menos probable que experimenten el tipo de crecimiento rápido que pueden ver las empresas más pequeñas y emergentes.
Además, debido a su tamaño y notoriedad, las grandes capitalizaciones tienden a estar bajo el escrutinio público y regulatorio, lo cual puede impactar en su operativa y, en consecuencia, en el valor de sus acciones. Por último, el hecho de que sean tan seguidas por los analistas puede hacer que sea más difícil encontrar "gangas" o acciones infravaloradas.
Ejemplos de large cap
Para terminar nuestro viaje por el mundo de las large cap, nos gustaría compartir contigo algunos ejemplos que te ayudarán a comprender este concepto con mayor claridad.
Para empezar, pensemos en una muy conocida por todos, en Apple. Como sabemos, Apple es una de las empresas más valiosas del mundo. Se trata de una compañía de tecnología estadounidense con un valor de mercado que supera ampliamente los 200.000 millones de euros. Apple es una large cap por excelencia: es una empresa madura, con una base de clientes leales y productos que son reconocidos en todo el mundo. Además, sus acciones se negocian con mucha liquidez y la compañía ha pagado dividendos de forma regular a sus accionistas durante muchos años.
Otro ejemplo de large cap podría ser la empresa Coca-Cola. Con más de 130 años de historia, la compañía es conocida en todo el mundo y ha demostrado su capacidad para generar beneficios de manera constante. Al igual que Apple, Coca-Cola es una empresa estable, con un historial sólido y un modelo de negocio que ha resistido la prueba del tiempo.
Finalmente, pensemos en una empresa española.
La large cap española por excelencia es el holding textil fundado por el Sr. Amancio Ortega, la gran Inditex. Aunque no es tan grande como Apple o Coca-Cola en términos de valor de mercado, Inditex es un excelente ejemplo de una large cap en el contexto español y europeo. Con marcas conocidas como Zara, Massimo Dutti y Pull&Bear, la empresa ha demostrado su capacidad para expandirse y generar beneficios en todo el mundo.