Re: Respuesta Casual
PERDONAR PERO MIS CONOCIMIENTOS INFORMÁTICOS SON UN DESASTRE Y NO HE PODIDO COLGAR ESTA RÉPLICA EN UNA INFORMACIÓN "CASUAL" RECIBIDA NO SE SI A TRAVÉS DE GOOGLE O YAHOO y por eso la reproduzco.
Parece ser que Don Vicente Martín Peña, no se considera experto en temas de contabilidad, según declaraciones suyas antiguas que saltaron a la prensa tampoco es experto en filatelia, entonces me gustaría saber en que es experto este buen señor, parece ser que segundo de a bordo, aunque si parece que en gramática parda dado la forma en el que él pretende quitar hierro cuando se le pregunta sobre la "insolvencia" con que hablaban de la empresa, manifiesta que era un "lenguaje coloquial", vamos entre "colegas". Creo que no nos hace falta a nadie que nos lo diga.
Además, como le permite la Constitución, no contesta a la acusación particular, aunque daría lo mismo que contestara, por el derecho que tiene A MENTIR ESCANDALOSAMENTE, dado nuestro inefable "estado de derecho".
Lógicamente, como le permite la Constitución no contesta a los abogados personados como acusación particular, qué más quieren algunos, blanco y en botella, aunque todavía es fácil que suelte alguna perlita más en lo que le queda por declarar.
Graciosa también la declaración del nada menos que "hijo del fundador" en cuanto se refiere a los sellos comprados (no dice nombre pero todos le conocemos, incluido su modesto chalet) al proveedor "único" (extremo que tampoco señala) señalándolos como "ERRORES DE CATALOGACIÓN", sin explicar que son tales "errores" aunque sí que fueron "cambiados" cuando, dice: SE CONOCIERON LAS "DEFICIENCIAS", curioso, curioso, solo faltaba.
Tampoco explica este "señor" que entiende él por PRECIO AJUSTADO AL MERCADO Y COHERENTE, lo que además tampoco DEMUESTRA, sino que es una declaración más de quien como ya hemos dicho, les está PERMITIDO MENTIR.
Tampoco DEMUESTRA, como dice que "... los SELLOS COMPRADOS POR AFINSA ERAN INCLUSO SUPERIORES A ALGUNOS CATÁLOGOS EXTERNOS…", claro está que tampoco señala cuáles eran esos catálogos, como mínimo para que los propios afectados puedan comprobarlo sin más.
En fin, la vida sigue y sigue ...
Saludos