El significado de: ¿asesorar?

No todas las personas se llegan a plantear una situación de si necesitan o no un asesor a su lado, pero la lógica nos dice que si una persona tiene que comprar un coche, montar un negocio, elegir una universidad para su hij@, buscar un proveedor, hacer la declaración de la renta o simplemente irse de vacaciones, se asesora por una persona que el/ella considere que es experto en la materia.

Con mi experiencia en el sector tanto como consumidor como trabajador, cada vez me doy más cuenta que el servicio financiero de la banca es y parece que continuará en una situación de despachar.

Hagamos un poco de memoria, hace tiempo en las farmacias parecía que se iba allí a simplemte comprar aquello que el médico nos recomendaba, hasta en algunos casos aquello que el vecino nos recomendaba. La situación actualmente parece que está cambiado, nos informamos por internet vamos al médico y después nuestra duda acerca del trabajo del médico, nos hace preguntar a nuestro farmacéutico si nos viene bien o si por el contrario será mejor no tomar, hemos llegado al punto extremo de la duda, que incluso vamos a sitios denominados herbolarios para no tomar “químicos” y buscar una solucion lo más sana para nuestro organismo.

El plantemiento es a mi forma de ver lógico, estamos nutridos de información no siempre veraz o adecuada a nuestro propio problema, pero que no causa más que la necesidad de conseguir cada vez mejor información. Al final tener información de todo nos hace más fuertes y llegará el día que la información se pueda considerar en su mayoría real.

Pero bueno, la pregunta es la siguiente, ¿cuál es la razón por la cual, los consumidores de servicios financieros ( es decir, todos los ciudadanos de este o cualquier otro país del mundo ) estamos en situación de falta de información, falta de conocimientos y falta de asesores que digan la verdad.

Por mi experiencia digo que no interesa, al final es una gran minoría la red de asesores financieros que van con la verdad por delante, que se preocupan de sus clientes y de su conocimiento, y que al final del todo gastan mucho tiempo y horas de trabajo en que sus clientes salgan por la puerta o se queden en sus casas con un sentimiento de tranquilidad y de al menos, haberlo entendido todo.

Pero la gran mayoría de asesores financieros y “asesores financieros” que ni son asesores ni financieros, que lo único que hacen es ser comerciales y vendedores de productos ni siquiera financieros, no les interesa que se sepa la verdad, al final ellos tienen su nicho, el mayor número de la población al cual llevan maltratando desde hace mucho tiempo.

Y entonces, ¿Qué es decir la verdad?

Algunos dicen que decir la verdad es buscar un punto intermedio entre lo que es una venta y lo que es una relación. Claro, pero esto no se entiende muy bien, os pongo un ejemplo:

Necesito una tarjeta de crédito, la pregunta lógica que te debería hacer tú asesor cuando te sientes con él es: ¿por qué la necesitas? , ¿cuál es la situación que tienes que te ha hecho plantearte la necesidad de tener dicha tarjeta?

Pero normalmente no prima lo lógico por encima de todo, sino que la respuesta de los que dicen ser asesores personales del cliente es: ¿cuánto limite necesitas?y normalmente esa es su única pregunta. Y ya la persona o el consumidor como le queráis llamar, habrá mirado en internet cuál es la entidad que menos cobra por tener una tarjeta y ya estará sentado delante de su nuevo o antiguo asesor, punto.

Y estos comerciales despachadores de productos le dicen al cliente que están a su lado y que le asesoran.

Cuando yo voy a mi asesor contable con mi empresa el me explica cuáles son las opciones que tengo y porque estoy tomando estas decisiones, y normalmente estoy con el más de una hora intentando entender que es lo que voy a hacer con la contabilidad de mi empresa.

Entonces, ¿por qué nos creemos que nos asesoran y por qué no buscamos las opciones cuando entendemos realmente lo que es asesorar?

Somos un ser vago, así es la única manera que puedo entender porque la gente no busca un cambio, porque la sociedad sigue conformándose con aquello que ya está puesto ahí, que les ha vendido lo que ellos consideraban y que para colmo ahora dicen que asesoran.

Yo tengo claro una cosa, si por la tarde voy a comprar una tv y en un año la tv muere, lo único que haré será no volver a comprar en el sitio donde la compré, muchos menos si me tengo que manifestar en la puerta para que me devuelvan lo que era mío, es decir, si yo compro una tv y entiendo que se puede estropear y a mi me explican que hacer en el caso de que se estropee. Por lo que en teoría estoy cubierto ante esa situación, pero si ocurre el suceso de estropearse, y no me lo cubren doy por descontado que todos aquellos que estáis leyendo esto no volveríais al sito.

Por lo que el día un encontreis a alguien del sector financiero que quiera estar con vosotros y que su única preocupación es que continuéis con él en todo su periodo laboral, al menos entenderemos que no intentará venderme una tele que no me satisfaga las necesidades y mucho menos me intentará colar un servicio de post venta que no existe.

Al menos así creo yo, que hemos filtrado bastante.

Y a vosotros, ¿qué os hace falta para dar el paso y cambiar?