Yo hablé con la sucursal y les expliqué que lo tenía complicado para ir a la oficina por motivos laborales. Me enviaron un documento por mail para que lo firmase y me pidieron que lo dejase en el buzón de la oficina. No recuerdo si también me pidieron las tarjetas, pero al cabo de un rato de abrir la oficina, me confirmaron que ya estaba todo cancelado y, efectivamente, no podía acceder a la banca online.
En mi caso, las únicas pegas de todo el tiempo que trabajé con ellos, son que una vez tuve que llamar a atención al cliente y era un 902 y que empezaron a cobrar comisiones a pesar de tener nómina domiciliada. Por todo lo demás, ninguna queja.