La sanidad de Singapur sigue siendo una referencia
Su calidad se halla en el top mundial y su coste es la mitad que el español y un cuarto del estadounidense.
La divergencia entre nuestro país y Singapur es que aquí el gobierno “gestiona” forzosamente la riqueza de los ciudadanos mientras que en Singapur la riqueza es retenida y gestionada por cada persona.
Las gigantescas cotizaciones que en España le rendimos al Estado, en Singapur permanecen obligatoriamente en una cuenta especial que posee cada ciudadano y que sólo puede utilizar para fines tasados (pensiones, educación, vivienda o sanidad).