NOTA DE PRENSA
Por presunta falta de diligencia en el control
EN CASO DE QUIEBRA DE EUROBANK, LA OCU ACTUARÁ CONTRA SUS ADMINISTRADORES Y EL BANCO DE ESPAÑA
Madrid, 18 de septiembre de 2003. Tras las declaraciones del Gobernador del Banco de España ante la Comisión de Economía del Congreso, la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) considera insuficientes sus explicaciones y entiende que ponen de manifiesto un preocupante nivel de desamparo del consumidor español. Si todas las irregularidades detalladas ayer por el Gobernador de España, totalmente desconocidas por los clientes de la entidad por amparo de una incomprensible confidencialidad legal, no constituyen razón suficiente para que el organismo de control prevenga a los inversores, la confianza en nuestro Sistema Financiero es más una cuestión de fe que de credibilidad. La protección del Fondo de Garantía de Depósitos, como ha venido insistiendo la OCU, hoy por hoy es insuficiente e incompleta.
Si la ley, como dijo el Gobernador, no permite actuaciones cautelares cuando existen indicios de mala gestión e irregularidades que rozan el delito, resulta evidente que la ley es ineficaz. Actuar según la ley en su nivel de responsabilidad debería llevarle, a juicio de la OCU, a valorar si el nivel de protección del inversor (sobre todo del pequeño inversor) es suficiente y, en caso contrario, proponer las modificaciones pertinentes. Modificaciones que la OCU viene exigiendo desde hace ya mucho tiempo y que deberían ir en la línea, por un lado, de garantizar un mayor nivel de protección de los inversores en cuantía y productos de ahorro (seguros, fondos, etc.) y, por otro, de dotar de mayor eficacia y transparencia a los sistemas de control .
Según declaraciones del Presidente de la OCU, don Carlos Sánchez-Reyes, "es intolerable el nivel de indefensión en la que se encuentra el inversor en nuestro sistema económico ante la absoluta falta de transparencia de los sistemas de control que hacen inviable cualquier medida de prevención frente actuaciones como las que ahora se están poniendo de manifiesto, llevadas a cabo por los administradores de Eurobank".
Por otro lado, la OCU lamenta la falta de sensibilidad mostrada ayer por el propio Gobernador del Banco de España y miembros del Gobierno al tratar de minimizar la importancia del problema por el hecho de que el 85% de los inversores estén cubiertos totalmente por el Fondo de Garantía sin aportar alternativas al resto de los inversores (casi 2.000, cubiertos sólo parcialmente) ni a los clientes con contratos en las Mutuas vinculadas a Eurobank, más allá de la espera de la situación que se derive del proceso de suspensión de pagos en marcha.
La OCU entiende que si este proceso acabara en quiebra, y con ella en perjuicios económicos para los inversores existiría una presunta responsabilidad de los administradores de Eurobank y sus auditores, pero también de quienes toman decisiones en los mecanismos de control del Banco de España. Por ello, en caso de que tal circunstancia se diera, la OCU actuaría ante la justicia contra todos ellos para intentar recuperar las cantidades perdidas por los inversores. En el caso del Banco de España, por su carácter de organismo público, la OCU considera que pudiera existir responsabilidad patrimonial del Estado por presunta negligencia en el control de Eurobank.