A la hora de invertir, al igual que medimos la rentabilidad financiera debemos analizar los beneficios que una empresa genera en la sociedad y en el planeta. Porque sólo las empresas que demuestran características positivas de sostenibilidad podrán mantener su crecimiento y rentabilidad a largo plazo. Ahora bien, no existe un enfoque universal para abordar la sostenibilidad. Inés del Molino, directora de cuenta de Schroders, nos presenta 5 claves que todo proceso de inversión debería tener en cuenta para asegurar que está aplicando la sostenibilidad de una manera consistente, así como ejemplos de “buenas” compañías que también son buenas inversiones.
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Inés es licenciada en Derecho y master en Mercados Financieros por IEB. Además, realizó el MBA del Instituto de Empresa en 2005. Inés se incorporó a Schroders en 2006 y es responsable, entre otros, de la relación con EAFIs y asesores independientes. Previamente, trabajó en el Departamento de Inversiones de ENRESA, en AYG y en Banif.