Lo que me da mala espina es que el banco parece ser que tiene mucho interés en que aceptemos el canje. ¿A ellos que más les da? Es nuestro problema si luego nuestras preferentes se devalúan hasta valer 0.
A ver si va a ser que al que no acepte le van a reembolsar el 100% de su inversión por alguna normativa europea que desconocemos y que les obliga a ello.
Por lo menos da mucho que pensar.