La pasada semana saltó el escándalo, el ex-tesorero del Partido Popular, Luís Barcenas pagó sobresueldos a miembros de la cúpula del partido, dichas cantidades oscilaron entre 5.000 y 15.000 euros según el cargo que se ocupaba.
La mayoria de este dinero negro procedía del pago de comisiones por parte de constructoras tras recibir contratos públicos o a cambio de adjudicarles obras en las numerosas sedes que el PP tiene a lo largo y ancho de la geografía nacional.
Ahora nos preguntamos, ¿alguno de los actuales miembros del gobierno cobró dichos sobresueldos?
La cosa no queda ahí, Luís Barcenas llegó a tener 22 millones de euros en una cuenta en Suiza, procedentes, al parecer, del Caso Gurtel. Lo más escandaloso de todo es que Luis Barcenas utilizó la amnistia fiscal aprobada por Mariano Rajoy para blanquear 10 millones de euros, de procedencia desconocida.
Finalmente Luis Barcenas es imputado por blanqueo de capitales y delito fiscal, a la espera del informe de la hacienda pública, delitos que le pueden llevar 21 años a la cárcel.
Si a este caso le añadimos la publicación de los nuevos delitos fiscales en contra de Iñaki Urdangarin, los cuales consisten en la elusión de 230.979 euros por el impuesto de sociedades en 2007 y más de 120.000 euros en concepto de IRPF, ya tenemos otra semana en la que todos los ciudadanos no sentimos insultados por aquellos que se supone, deben dar ejemplo.
En un país donde el yerno del rey es imputado por los delitos de prevaricación, malversación de fondos públicos, fraude a la administración y falsedad documental y en el que existen más de trescientos políticos imputados en casos de corrupción,
¿Cómo se le puede exigir a un simple fontanero, por poner un ejemplo, que cuando preste un servicio lo haga con IVA, si los que se supone deben dar ejemplo hacen todo lo contrario?
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Jose Antonio Soler
Departamento Fiscal
CIRO Consulting