Mi querida abuela hizo una pequeña fortunita gracias principalmente, a un estilo de vida frugal, y al logro de sobrevivir hasta los 98 años. El tener una pensión decente de viudedad, debido a la profesión de Doctor en Medicina de mi abuelo, contribuyó a que el ahorro durante muchos años le ayudara a crear un pequeño patrimonio inmobiliario, como no podía ser de otra manera en este, nuestro bienamado país. Era una fuente de sabiduría para el refranero popular, y una de mis favoritas siempre fue: " querido hijo mío: no somos lo suficientemente ricos para permitirnos cosas baratas".
A veces una simple frase puede cambiar tu vida, si posee la suficiente sabiduría y eres capaz de reflexionar y asimilarla. Desde hace 20 años, trato de comprar el mínimo de bienes materiales posible. Todavía conservo las mismas Nike que compré en el año 2.000 en Andorra y sólo tengo un traje para las bodas, con el que me casé, y que he tenido que llevar al sastre hasta tres veces para ensancharme la cintura, pues parece que encaje con el tiempo...
Eso sí, cuando compro algo, que sea de calidad. No hace falta comprarse unos zapatos de 300#, ni tampoco unos de 5€ del Bazar Chino de enfrente de casa. A lo mejor con unos de 50€, podemos conseguir que nos duren 10 años. Tampoco hace falta tener un traje para cada día de la semana, con que tengamos uno bueno y lo cuidemos es suficiente, y además, si es de calidad causaremos mejor sensación que si tenemos 7, pero parecemos Cantinflas en una boda de alta alcurnia.
Con los negocios pasa lo mismo, si compras uno excelente como Nestlé muy probablemente te durará 100 años, y lo heredarán tus sucesores. Además, cuando venga una época de crisis caerá menos que un mal negocio, por su fuerte posición financiera y de mercado. Cuando el mercado vuelva a subir, volverás a ganar dinero, como todo el mundo, y mientras sigas viendo sus productos en el lineal cada vez que vayas a comprar al supermercado, continuarás durmiendo a pierna suelta.
Acciones de Calidad contra Value y Growth. Fuente: Factorsearch
Es obvio que los negocios de calidad se comportan mejor que los negocios Value o de crecimiento, aunque muchas de estas últimas también son acciones de calidad como el caso de Amazon o Microsoft. Lo difícil del Value es acertar con el timing y con la acción correcta que te puede dar un rendimiento excepcional. En este juego hay pocos inversores que puedan ganar a la Banca, y el mejor de todos no somos nosotros, sino un señor que va a cumplir 9 decenios en breve.
Si comprobamos el Índice MSCI World Quality y lo comparamos con el MSI World, veremos que durante toda su historia lo ha batido sistemáticamente, con una media aproximada del 3%. Además, todos sabemos elegir mucho más fácil una empresa de Calidad y reconocerla, que acertar un turnaround o una infravaloración del mercado no reconocida, lo cual cobra mayor dificultad hoy en día, por el acceso a la información de que dispone todo el mundo.
Así pues, mis queridos componedores, hagan sus valoraciones, reflexionen, y recuerden que deben ser capaces de tomar sus propias decisiones, alejarse de los cantos de sirena, las narrativas y los podcasts radiofónicos interminables que no hacen más sino de sembrar dudas en un mundo que es más sencillo de lo que parece, y más complejo de lo que nos cuentas los oligarcas que lo dominan.
Atentamente,
@emgocor