Este fin de semana se cumplió el segundo aniversario de Ecos Solares. Apuntes de energía y economía. Por casualidad descubrí que el 24 de enero de 2012 empecé a volcar por escrito parte de mis inquietudes. El blog ha sido una excelente herramienta para ordenar mis pensamientos, ahondar en mis razonamientos, elaborar estrategias complejas, educar y enseñar a todo aquel que se deje y expresarme en la más absoluta de las libertades.
Pero en este tiempo no he tenido sólo oportunidad de hacerme oir, sino también de escuchar. He podido dialogar e incluso discutir (del latin discutere, disipar, resolver... no pelear) sobre energía y no pocos otros temas, aprender lo indecible y descubrir, no pocas veces afortunadamente, que estaba equivocado. Como ya dije en la entrevista que gentilmente me hicieron los de Rankia, y a los que agradezco mucho su defensa de mi invendible libertad de expresión desde este humilde blog, me vanaglorio de los errores cometidos pues de ellos se aprende muchísimo.
Respecto al ámbito de los temas tratados, creo que he sido bastante fiel a aquel primer post y me he esforzado en buscar alternativas de inversión en mi ámbito de especialización, la energía y más concretamente las renovables, pues dije lo siguiente:
Existen muchas y muy buenas oportunidades de inversión que se empiezan a materializar ahora mismo sin tener que seguir castigando a este mundo. La tecnología avanza a pasos agigantados gracias a la capacidad de previsión humana de anticiparse a los problemas y haber invertido con antelación en fuentes energéticas menos agresivas. Hoy disponemos de opciones bastante menos dolorosas para mantener la economía funcionando. Quizás ha llegado el momento de consumir y no depredar, de pescar sin ensuciar el río y de invertir sin cargarse un ecosistema entero, y todo ello contribuyendo a la economía incluso a corto plazo. Trataré de trasladar esas oportunidades, si las encuentro a buen precio, a la Comunidad.
El balance es muy positivo a poco que buceéis entre los artículos. Las empresas, solares, eólica, de movilidad eléctrica, etc, han evolucionado muy bien en el último año y medio en consonancia con un despliegue increíble del sector. Sigo detectando oportunidades en las renovables, pero ahora me encuentro más volcado en lo que puede representar el negocio de los edificios de consumo cero de energía, las ESEs y la movilidad de todo tipo.
Por el camino he tenido tiempo de distraerme con veleidades más especulativas ajenas al mundo de la energía, como la serie de tradeos a Apple, mi aventura con el bitcoin, o la compra de volatilidad pre-earnings conference. De todas ellas he aprendido, pero como conclusión obtengo lo siguiente: No soy un trader de corto plazo y trato, desde que me dí cuenta de ello, de no sacar demasiado los pies del tiesto de mi ámbito de oportunidad. Desde hace meses me centro sobre todo en acciones o cfds con bajo apalancamiento y compra de opciones en mi sector, y sólo especulo puntualmente cuando se presenta la oportunidad. Tras estos dos años mi balance como inversor-especulador es prácticamente neutro. El resultado podría ser considerado como una pérdida de tiempo, pero teniendo en cuenta que esos dos años han servido para definirme como agente de mercado, conocerme mejor a mí mismo y constatar que sé mucho más que antes (y mucho menos que mañana) y sobre todo que no me he arruinado, creo que el balance es bastante positivo.
Teniendo en cuenta que poseo un punto de vista muy particular sobre un sector bastante complejo, el energético, y que rechazo radicalmente opciones energéticas que mucha gente aún acepta como algo válido, considero que las cifras de lectores y comentarios que alcanza Ecos Solares es más que satisfactoria. Números aparte, sois vosotros, los que me hacéis llegar vuestro aliento y vuestro cariño, los que dáis sentido a que dedique una porción de mi vida a comunicar lo que pienso y siento.
Gracias por seguir conmigo y al equipo humano de Rankia por ponérmelo tan fácil. Que nos veamos muchos más años y que os lucréis conmigo sin malgastar el capital natural que se nos ha regalado.