Como viene siendo habitual, junto al vídeo que explica mi visión acerca de los mercados financieros traigo a colación unos gráficos que pueden ilustrar un poco más algunos de los argumentos esbozados.
En primer lugar, y como se deriva de los algunos posts escritos con anterioridad, debemos destacar que con los precios actuales son preferibles las acciones a los bonos al 2% ya que estos útlimos no cubren ni la inflación. Esto contrasta notablemente con la tendencia que observábamos hasta ahora de inversión en bonos y es que si durante la última década el porcentaje medio de acciones mantenidas en un portfolio era del 20%, actualmente esta cifra es del 6%.
Nuestra apuesta por las acciones es por un largo plazo (próximo decenio) y cabe preguntarse como acabará afectando todo ello a los bonos y planes de pensiones definidos a menos de un 2%.
Por el llamado "efecto enero", aquellas acciones más rezagadas del último año podrían ser las que observaran un mejor comportamiento durante este inicio de 2013 debido a que los inversores pueden estar dispuestos a sumir un mayor riesgo gracias a la posibilidad de recuperar las inversiones a lo largo de todo el año.
Por tanto, no es descartable que en los primeros compases del año los países periféricos y dentro de estos países, las acciones del sector bancario y telecomunicaciones, lo hagan mejor que el resto,.
Tratando sobre el largo plazo, una buena apuesta puede ser la de brokers americanos del tipo Blackrock puesto que los ETF's están creciendo a tasas del 30%. A pesar de este crecimiento, pensamos que lo adecuado sería mantener una cartera equilibrada de ETF's y fondos. Otro de los sectores que puede resultar interesante es el del comercio electrónico (Amazon) debido a las tasas de crecimiento que pueden experimentar y que ello favorecería un impulso en la cotización de dichas compañías.
Nuestra posición: comprar acciones de países emergentes o Europa y también Asia, donde debemos destacar a Japón. El país nipón cotiza a multiplos muy baratos y puede resultar una opción igual de interesante que el resto de países asiáticos. Preferimos Europa a Estados Unidos y dentro del Viejo Continente los países periféricos como España o Italia pueden hacerlo relativamente bien.
Por úlltimo destacar que el tipo de interés del pasivo ha bajado del 2% al 4% y ello sumado al hecho de que el Estado puede financiarse bien, puede provocar un trasvase de todo ese dinero hacia la bolsa.