Parece ser que el MEFF va a reimplantar el futuro sobre el bono español a 10 años. Éstas serán las características:
Interés nominal, el 4%
Vencimiento a 10 años
Valor nominal, 100.000 euros. Valor de la centésima, 10 euros.
Vencimientos: marzo, junio, septiembre y diciembre
Horario: desde las 8 hasta las 17:15
Este futuro va a resultar muy interesante porque se va a convertir en una de las pocas posibilidades de cubrirse contra la bajada a los infiernos de España. El llanto y el crujir de dientes de nuestro amado país es seguro, sólo falta concretar el plazo y la intensidad del sufrimiento. Como desgraciadamente ningún partido político tiene la valentía de apartar a sus propias sanguijuelas del suministro de sangre, la anemia del Tesoro está garantizada.
La cobertura de la tragedia se tendrá que hacer comprando el bono alemán a 10 años y vendiendo el español. Lógicamente, habrá que aprovechar alguno de esos días en los que la gente está convencida de que está todo arreglado, y que Don Tancredo Rajoy dice que subiendo los impuestos 6.000 millones controlará un déficit galopante sin recortar el despilfarro y la corrupción en absoluto.
El diferencial entre los dos bonos ahora se encuentra alrededor de 45 figuras. El bono alemán cotiza sobre los 138 y el español rondaría los 92-93 si cotizara. Para saber dónde esta el suelo de este spread, hay que tener en cuenta que, debido a que el bono alemán tiene un interés nominal del 6%, si los dos bonos ofrecieran la misma rentabilidad, el diferencial estaría alrededor de 16 figuras. Por ejemplo: si los dos bonos dieran un interés del 4%, el alemán cotizaría a 116 y el español al 100%.
Lógicamente, la probabilidad de que EsPPaña pague la misma rentabilidad que Alemania es muy remota, teniendo en cuenta la trayectoria de nuestro flamante gobierno. Los sucesivos gobiernos que sufrimos han conseguido que el término "administraciones públicas" en España sea un oxímoron.
Últimas noticias del frente: el gobierno le baja el sueldo a los directivos de las empresas públicas que debería haber cerrado al día siguiente de empezar a gobernar. El ahorro de media docena de millones ha sido portada de las noticias, mientras se añaden miles de millones al incendio de las autonomías para que no quiebren. Hace feo que los compañeros de partido queden como unos ineptos. El problema es que, para disimular, hay que salvar al resto de autonomías gobernadas por otros partidos. Como es natural, nadie menciona ningún recorte de gastos suntuarios, ni siquiera se les pide un acto de contricción.
La pereza y la desidia impide que los de abajo se levanten, pero cuando se den cuenta y quieran reaccionar será demasiado tarde. A los vampiros hay que eliminarlos inmediatamente después de que te dan el primer mordisco, cuando ya te han dejado sin una gota de sangre no te quedan fuerzas para clavarles la estaca. Desgraciadamente, los chupasangre de todos los colores tienen a su disposición un arma letal de “distracción masiva” llamada televisión, y esa potencia destructiva del sentido común no se puede contrarrestar con palabras escritas.
Un consejo: si permaneces de rodillas, aparentas ser más pequeñito y el otro se envalentona.