He encontrado este post y me ha gustado mucho.
A continuación pongo mi traducción libre.
Hay muchas razones por las que el oro sigue siendo nuestro favorito, desde los temores de inflación y las preocupaciones de la deuda soberana a los problemas económicos más profundos y sistémicos. Pero seamos honestos: está subiendo desde hace más de 11 años, y sólo los imprudentes no pensarían cuándo puede terminar esta tendencia..
¿Es el momento de empezar a pensar en vender? En una palabra, no. He aquí el por qué.
Hay un indicador que indica claramente que aún estamos en un mercado alcista - y, además, que podemos esperar que los precios siguen aumentando. Se trata de los intereses reales negativos.
La tasa de interés real no es más que la rentabilidad menos la inflación. Por ejemplo, si usted gana un 4% en una inversión que devenga intereses y la inflación es del 2%, su rentabilidad real es 2%. Por el contrario, si su inversión gana un 1% pero la inflación es del 3%, su tasa real es de -2%.
Este cálculo es el mismo independientemente de lo altos que sean los intereses: un tipo de interés del 15% y 13% de inflación sigue siendo un interés real del 2%. Esto explica el por qué las tasas de interés altas no son necesariamente negativas para el oro, es el tipo de interés real el que afecta a lo que el oro va a hacer en última instancia.
¿Qué nos dice la historia?
La siguiente tabla calcula la tasa de interés real restando la inflación anualizada del interés de los bonos del Tesoro a 10 años. Las áreas destacadas en gris son los períodos en los que la tasa de interés real estaba por debajo de cero, y como se puede ver, coincide con las subidas del oro.
El oro sube cuando las tasas reales de interés son bajas o en descenso, mientras que los intereses reales altos o crecientes causan un impacto negativo. Este patrón era cierto en la década de 1970 y funciona igual hoy en día.
Un estudio más detallado de este gráfico nos dice que estamos en un interés real crítico. Mirando el gráfico se puede ver cómo el oro se comporta cuando las tasas reales se encuentran en el 2% o menos.
La razón de este fenómeno es sencilla. Cuando las tasas de interés reales están en cero o por debajo, los bonos dejen de ser interesantes, porque el retorno es inferior a la inflación. En estos casos, la inversión es en realidad una pérdida de poder adquisitivo - independientemente de la rentabilidad nominal. Entonces, el interés de un inversionista se traslada a los activos que ofrecen rendimientos superiores a la inflación ... o al menos a alguno de los vehículos donde el dinero no pierde valor. El oro es una de las herramientas más fiables y eficaces en este escenario.
Los políticos en los EE.UU., la UE y una serie de otros países mantienen las tasas de interés bajas, lo que, a pesar de la baja del IPC, empuja las tasas reales por debajo de cero. Esto hace que el efectivo y los bonos del Tesoro sean perdedores en estos momentos. Los inversores sólo pueden mantener su poder adquisitivo con el oro, que está superando a la mayoría de las inversiones que devengan intereses, debido a la subida del precio del metal.
Aquí hay otra manera de verificar esta tendencia. Como muestra el gráfico siguiente, de enero de 1970 hasta enero de 1980, el oro ha tenido un retorno total del 1,832.6%. Esto es mucho más que la inflación durante esa década, que ascendió al 105,8%.
En la tendencia alcista, el oro ha ganado el 556,3% desde 2001, mientras que la inflación desde entonces ha sido del 30%.
Más apoyo a esta tesis es el hecho de que, cuando las tasas reales son positivas, el oro no ha funcionado bien. Esto se puede ver en la siguiente tabla, cuando los tipos de interés reales fueron superiores a la inflación.
El precio del oro fluctuó entre $ 300 y $ 500 para el período de veinte años cuando las tasas fueron positivas. Este es un fuerte recordatorio de que los mercados alcistas no duran para siempre - incluso los de oro - y que en algún momento tendremos que vender para asegurar la ganancia.
Así que si la historia demuestra que el oro va bien en un ambiente negativo de tasas reales y mal durante los períodos positivos, la pregunta natural se convierte en ...
¿Hasta cuándo tendremos tasas reales negativas?
Ben Bernanke dijo en enero que espera mantener a corto plazo las tasas de interés cercanas a cero "por lo menos hasta finales de 2014." Estos bajos tipos de interés están destinado a "apoyar una recuperación económica más sólida y reducir el desempleo." Mientras que su estrategia es discutible, lo que implica que por poca inflación que se produzca se seguirá manteniendo la tasa real negativa y por lo tanto el oro se quedará en un mercado alcista.
¿Qué pasa si la economía mejora? Después de todo, no hay datos económicos que muestran que la economía puede encontrar su equilibrio, por lo que algunos creen que las tasas de interés podrían subir el próximo año. En relación a los datos anteriores, la respuesta a la pregunta es: "¿Qué hará la inflación?" En otras palabras, las fluctuaciones de los tipos de interés por sí solos no son importantes, sino su diferencia con la tasa de inflación. Si la inflación sube al mismo tiempo y se mantiene la tasa real negativa, debemos esperar que el oro permanecerá en un mercado alcista.
Con la cantidad obscena de dinero que ya ha sido impresa, la elevada inflación parece casi seguro que llegará pronto, incluso aunque no se imprima más dinero. Es por eso que creo que el fin del mercado alcista del oro aún no está a la vista.
Un punto más. Como se puede observar en las tablas anteriores, esta tendencia no se invierte de un día para otro. Los inversores tardan meses o años para cambiar de las inversiones que devengan intereses a los metales o viceversa. Y cuanto mayor sea la tendencia, más lento será el cambio. Las tasas reales han sido negativas desde hace una década, y con una inversión institucional en su mayoría ausente del mercado de los metales, parece razonable esperar que la tendencia en el oro no cambiará en el corto plazo.
Implicaciones para los inversores
Armados con estos datos, hay pasos concretos que usted puede tomar con sus inversiones en este punto, así como las expectativas razonables que puede tener de cara al futuro:
1 – Se puede comprar oro hoy. Mientras las tasas de interés reales sean negativas el oro se mantendrá en un mercado alcista. Si ya se tiene un poco de oro, es conveniente preguntarse si es suficiente en un momento en el que tener dinero en el banco es una propuesta perdedora (y yo añado, arriesgada).
2 - No hay que preocuparse cuándo llegue un aumento de los intereses. Hay que vigilar el tipo de interés real en su lugar.
3 - En nuestra opinión, las tasas reales seguirán negativas durante algún tiempo, por la sencilla razón de que pensamos que la inflación seguirá en aumento. Pregúntese: ¿La Fed y otros bancos centrales elevarán sus intereses lo suficiente para ponerse al nivel de la inflación? Algún día, seguro ... pero no en el corto plazo.
4 - Cuando las tasas reales se vuelvan positivas, sobre todo por encima del 2%, puede que haya llegado la hora de vender. Tendremos que ver lo que está pasando en el mundo en ese momento, si hay un caos financiero, el factor miedo puede causar que el oro se salga de este patrón histórico. Pero aunque eso no ocurra, hay que tener en cuenta que mientras el precio del oro fluctúa todos los días, el cambio del oro a otro tipo de inversiones no se producirá durante la noche. Hay que darle un poco de tiempo para tener más clara la decisión.
Hay un montón de razones para estar en oro hoy, y es probable que haya más antes de que sea hora de decirle adiós. Mientras tanto, nos consuela el hecho de que el indicador más fuerte de toda la historia nos dice que el mercado alcista del oro está vivo y le quedan algunos años de dar buenos resultados.
AHORA MI OPINIÓN
Es altamente probable que la plata obtenga unos resultados ostensiblemente mejores que el oro mientras dure la tendencia primaria alcista. Lógicamente, a cambio de una mayor volatilidad, que puede hacerla no apta para personas con poco colchón o excesivamente apalancados.