Tanto el oro como la plata y el cobre han entrado en tendencia primaria bajista.
Lo del cobre tiene sentido, lo del oro y la plata no tiene ninguno. Que mientras el mundo quiebra en directo en televisión, el único valor refugio de verdad caiga en picado es bastante absurdo. Pero la realidad es tozuda.
Desgraciadamente, a partir de ahora no se me ocurre ningún agujero para meter la cabeza y salvar el patrimonio.
Como me fio menos todavía de los papelitos que de los metales, no voy a vender nada de metal físico, pues el riesgo de hacer eso me parece excesivo. Lo que sí se puede hacer para evitar dos riesgos en una sola operación es lo siguiente:
El que tenga metal físico se lo queda, con eso se evita la confiscación de sus cuentas en los bancos. Y para evitar las pérdidas durante la tendencia bajista, aprovecha los rebotes (supongo que habrá una vuelta a la rotura) para ponerse corto con CFDs. No es una estrategia que me guste mucho, pero las alternativas me gustan menos.
He dicho varias veces en los últimos dos años que mi objetivo no es ganar dinero, sino perder poco y seguir comiendo casi todos los días, aunque era consciente de que no me lo iban a poner nada fácil.