Cuando los profesionales se dirigen a los pardillos, utilizan el nombre de bonos de alto rendimiento, pero el nombre por el que se los conoce en todo el mundo es "bonos basura".
Bonos basura son aquellos que no cumplen los requisitos para el grado de inversión. Como los bonos de Audasa ni siquiera tienen rating, por el principio de precaución se deberían considerar basura en estado de descomposición.
No me extrañaría que las plataformas de perjudicados por las preferentes tengan que hacerse cargo de estos bonistas en un futuro cercano. A estos bonos se les podría llamar "bonos apreferentados" o "preferentes abonadas". Los abogados de estas plataformas podrán alegar que el Estado fue cómplice de esas emisiones, pues ofrecer beneficios fiscales a los suscriptores se puede entender como un aval implícito del Estado a dichas empresas.
Cuando una empresa quiere colocar una emisión de bonos, suele ofrecer un precio que cotice entre un 1% y un 2% por debajo de sus propias emisiones en circulación. De esa forma, los profesionales tienen un estímulo para comprar la nueva emisión, aunque sea a costa de vender las que hay cotizando (a la empresa no le afecta que baje algo el precio de las emisiones en circulación, pero le interesa colocar la nueva emisión).
Pero como los bonos que nos ocupan es imposible que se puedan colocar a los profesionales, no hay más remedio que acudir a un canal de colocación que sea tan potente que pueda colocar cualquier cosa. El mejor canal de colocar productos en Expaña se llama red de sucursales de las entidades financieras, y el precio por colocar bonos de "alto rendimiento" se cotiza alrededor del 5%. El precio es caro, pero los resultados son excelentes, se colocará toda la emisión y todavía se quedará corta. Además, no importa el coste del 5%, de todas formas, eso lo paga el comprador de los bonos.
El comprador pagará 100 por algo que el primer día que cotice lo hará a 95, suponiendo que no cambien las circunstancias del mercado de bonos.
¿Y cómo se puede saber que pasará eso?
Pues muy sencillo, mirando a cómo cotizan hoy los bonos de la misma empresa.
Los bonos de Audasa con vencimiento dentro de 8 años y cupón del 6%, al precio de hoy dan una rentabilidad financiero fiscal del 7.20% anual, para alguien que pague el 21% en el IRPF.
La nueva emisión para la misma persona se queda en una rentabilidad financiero fiscal del 6.70%.
Si ajustamos el precio de la nueva emisión para que ofrezca la misma rentabilidad que la vieja, teniendo en cuenta, además, que al quedarle dos años más de vida debe ofrecer una rentabilidad mayor, el precio del 95% es muy razonble.
Aparte de eso, como ganar el 5% en dos semanas es muy goloso, las entidades colocadoras comprarán para su cartera, además de las que enchufen a los clientes, con la intención de ir soltando luego el papel en el mercado cuando coticen. Eso hará que puedan bajar algo más del 95%.
RECOMENDACIONES
No comprar bonos de Audasa, ni nuevos ni viejos (recomendación de la casa)
Para los temerarios que nunca hacen caso a nadie y les gusta jugarse el tipo: comprar emisiones en circulación que cotizan en el Send en vez de la nueva emisión. Además, van a tener una ventaja añadida:
Con la nueva emisión, en diciembre sólo cobrarán un cupón del 2.40%, y la deducción se aplicará sobre ese 2.40%. En cambio, con la emisión vieja, se cobrará un cupón del 6%, con la deducción sobre el total de ese 6%.
Para los años siguientes también se tendrá la ventaja de una deducción sobre un importe mayor, pues el cupón es mayor.
DESPUÉS DEL BANCO MALO, AHORA LA AUTOPISTA MALA
Hace pocos días, nuestro amado gobierno ha creado la autopista mala, que costará 5000 millones a los cuatro tontos que todavía pagan impuestos.
Los lectores pensarán que si ya está hecha la autopista mala, en caso de quiebra de esta empresa el Estado pagará a los bonistas y se quedará con el marrón. No hay que ser ingenuos, el gobierno ha creado la autopista mala para salvar a los bancos acreedores por enésima vez a costa de los súbditos. Hacerlo a la inversa ni se le ha ocurrido.
CARACTERÍSTICAS DE LA NUEVA EMISIÓN
Importe Nominal de 500 euros
Plazo a 10 años
El tipo de interés es del 5,20% anual
Importe nominal de la emisión: 193.000.000€
Código ISIN: ES0211839198