Aprovechando las horas en las que la brisa hace confortable la lectura y acomodado en mi hamaca de tela transpirable, he terminado de leer el último libro de IBN Asad, al tiempo que me dejaba acariciar por los envolventes rayos del Padre Sol.
Precisamente, uno de los más claros ejemplos del lavado, aclarado y centrifugado de cerebro que ha sufrido la humanidad, y que Ibn Asad expone brillantemente en la trilogía que presento a continuación, ocurre todos los años por estas fechas: todas las "presstitutas" y medios de incomunicación alertan al público de los grandes peligros de tomar el Sol. Como es natural, encaminan al público a comprar productos caros y peligrosos para la salud, con el único fin de protegerse del Sol, que paradójicamente producen lo contrario de lo que se espera: Los protectores solares protegen de los rayos UVB, pero no de los rayos UVA. Eso permite que te quemes mucho más sin darte cuenta de que te estás quemando ni sentir el dolor de la quemadura. Hecho que provoca que se produzcan más melanomas malignos entre los usuarios de protectores solares que entre los que no los usan.
Yo nunca he usado un protector solar, ni pienso usarlo en el futuro. Puedo hacer eso porque conozco al Astro Rey y sé muy bien cuándo tomarlo: el Sol hay que tomarlo, progresivamente, a cualquier hora del día y en cualquier día del año, siempre que la sombra que proyecta tu cuerpo sea más larga que el cuerpo mismo. Es una regla sencilla y fácil de recordar, que te libra de derrochar el dinero en productos peligrosos, además de quedarte pringoso como los helados que se derriten en las papeleras y parecer un pringao al usarlos. .
Después de este inciso, que he considerado apropiado debido a las fechas en las que estamos y a la voracidad de la industria de recaudar dinero dos veces con la venta de un sólo producto, vamos a seguir con los libros de Ibn ASad.
No creo que existan otros libros más difíciles de presentar que esta trilogía. La dificultad de presentarlos es parecida a explicarle el color magenta a un ciego de nacimiento o convencer a una madre que la leche de vaca es funesta para su hijo. Me parece una tarea hercúlea y, como no soy Hércules, voy a tratar de hacer lo que pueda.
Es muy difícil hacerle ver a alguien que todo lo que le han dicho desde que nació es mentira. Que lo que creía que eran los pilares fundamentales de sus valores son una farsa con la que ha sido programado con absoluta desfachatez. Que la mayoría de las personas a las que consideraba como ejemplos de virtud y humanidad son criminales de la más baja calaña. En resumen, que se la han metido doblá.
Como es lógíco, es muy difícil sacar del contexto de los 3 libros algunos temas para resaltar su importancia, pues incluso después de leer varias veces los 3 libros y asumir toda la profusión de datos y hechos que demuestran que somos un rebaño y que los pastores son unos criminales, la mayoría de personas no será capaz de entender la trama y sus funestas consecuencias. Los que no lo comprendan no será por falta de información, sino por todo lo contrario: su condicionamiento sociocultural ejercerá como un filtro que no permitirá el paso de la información relevante para completar la imágen del rompecabezas.
Lo mejor es leerse los tres libros por este orden. Otra ventaja que les veo a estos libros es que son más baratos que el libro que Zapatero tuvo la desfachatez de escribir (o le escribieron) y dicen cosas más interesantes.