El timo de la bajada del IVA y los tramos en la tarifa eléctrica

Es curioso que ningún medio de desinformación se ha molestado en decirle a sus lectores y teleadictos que en los últimos dos meses hemos sufrido unos cambios (a peor) muy importantes en los tramos y en los precios de la electricidad. Y no me estoy refiriendo a la subida de los megavatios, que eso sí que sale todos los días, quizá para disimular lo otro.

Hace dos meses nos dijeron en todos los medios que había que levantarse a planchar por la madrugada y poner la lavadora, aunque el centrifugado despertara a los niños o les produjera pesadillas.

Y, efectivamente, los que lo hicieron, pagaban los Kw a la mitad, como se puede ver en los precios de la electricidad del día 14 de septiembre.

Aquí está la web para ver los precios de cada día.

Luego, el día 15 de septiembre nos comunicaron con júbilo y alborozo que iban a bajar el IVA, lo que llenó al público de orgullo y satisfacción, y todos se sintieron rey por un día. Pero el caramelo envenenado pronto mostró su amargo sabor.

El 17 de septiembre, ya se pudo ver el timo de la rebaja del IVA en todo su esplendor.

Por un lado, el tramo valle ya no costaba la mitad que la hora punta, sino que resultaba más caro. Una vez que se había convencido a la gente que se desvelaran para poder consumir electricidad barata, y sabiendo que nadie lee la letra pequeña y mucho menos la grande, ya se les podía meter el rejonazo y cobrarles lo que les diera la gana.

También se recortó la diferencia entre los tramos que antes existía y que hacía que mereciera la pena consumir en las horas baratas. Todos los precios fueron llevados a la parte superior con pocas diferencias entre los tramos

Para más cachondeo, en el Importe por peajes de transporte y distribución, antes del 15 de septiembre la tarifa punta triplicaba a la de llano y era 20 veces mayor que la del valle. A partir  del 15 de septiembre, la tarifa punta costaba 1 céntimo justo más que la de llano y 3 céntimos más que la de valle. El peaje también ha sido igualado, no han dejado la más mínima posibilidad de ahorrar. Gasta a la hora que quieras que te va a costar igual de caro.

Y, lo peor de todo, han sembrado el desconcierto, para que los pocos que quieren ahorrar unos céntimos, no sepan a qué atenerse ni a qué hora poner los relojes para que arranquen los electrodomésticos. Desde el momento que en la tarifa valle te cobran más que en la hora punta, y no te dan información sobre lo que piensan hacer durante toda la semana, es imposible planificar el consumo, y acabas cayendo en la trampa de poner las cosas en la hora más cara.

Y así llegamos al día de hoy, que los que se han levantado por la madrugada para lavar y planchar han perdido sueño y dinero, ya que lo podrían haber hecho más barato y mucho más cómodo a las 3 de la tarde.

Como la emergencia del virusito está decayendo, ya están afilando las herramientas para desplegar una potente campaña con la emergencia calenturienta. Algo que ahorraría el consumo de combustibles fósiles sería que supieramos a qué horas sobra electricidad, que si no se usa se va a perder, para no poner los electrodomésticos en otras horas que obligue a las centrales a consumir fuel o gas para atender la demanda.

Ya sé que es un oxímoron, pero, qué bonito sería que los políticos planificaran.