Aprovechando que la Santísima Trinidad se traslada a una aldea rural con paisajes bucólicos y meriendas campestres rodeadas de osos y madroños, hay que poner en la vacante a la persona adecuada para el cargo.
Después de haber sufrido a los últimos 27 ministros/as de Sanidad, creo que ya nos hemos ganado tener a alguien competente.
Juan Gervas va sobrado de aptitudes para ocupar ese cargo y aportar un gran beneficio a todos los españoles. Tengo que admitir que también tiene sus defectos: es trabajador, inteligente, humano... Aunque su mayor defecto prácticamente le incapacita para estar en política: es honesto.
Es nuestra obligación exigir a nuestra menestra de igual da, la paridad para los altos cargos: que al menos la mitad sean honestos y la otra mitad sigan como hasta ahora.
Juan Gervas puede evitar mucho dolor y sufrimiento a los españoles, españolas, neutros y mixtos. Y no me refiero sólo al dolor producido por tratamientos innecesarios con efectos secundarios, sino al inmenso dolor de los ciudadanos al pagar impuestos estratosféricos para enriquecer a la industria, que le vende a la administración lo que él muy acertadamente llama “marcas de fantasía”.
Lo primero que he pensado es que Juan no aceptaría el cargo, pues es demasiado inteligente para complicarse la vida, por eso habrá que apelar a su honestidad: decirle que si no acepta, sería indirectamente responsable de todos los desmanes que su sustituto pueda provocar, que no serán ni pocos ni pequeños. Ante esa disyuntiva moral, creo que aceptará.
Aquí os dejo el vídeo de una entrevista muy interesante. Para animaros a verlo, sólo diré que, entre otras singularidades, es un profesional que no recibe a los visitadores médicos y sólo receta genéricos.
NO HAY ENFERMEDADES, SINO ENFERMOS from ALISH on Vimeo.
Este otro vídeo se grabó en noviembre del 2009, cuando el auge de la gripe cerdita.
JUAN GERVAS - ENTREVISTA from ALISH on Vimeo.