La evolución histórica de los ingresos en el fútbol ha conllevado una creciente diversificación, algo muy necesario en Finanzas y Dirección de Empresas para reducir riesgos. Por otro lado algunas fuentes de ingresos han ido perdiendo importancia en función de otras, como es el caso de los ingresos procedentes de los abonos y socios que han ido perdiendo importancia frente a los derechos de televisión Los ingresos del fútbol provienen básicamente de tres grandes bloques a) Taquilla,socios, abonos y cesión de estadio b) Publicidad, patrocinio, museos y tours y c) Derechos de TV. En cuanto a situación actual los derechos de TV son del orden del 50% y los otros dos segmentos aportarían un 25%.
La legislación no cambia el mundo de la noche a la mañana, sobre todo si se incumplen ciertos aspectos y principios como es por ejemplo la coercibilidad, supervisión y control, etc. Pero no es menos cierto que en el caso que nos ocupa ha existido cierta legislación que ha cambiado notablemente el mundo del fútbol, como es el Real Decreto 5/2015 de 30 de abril, de medidas urgentes en relación con la comercialización de los derechos de explotación de contenidos audiovisuales de las competiciones de fútbol profesional. Este marco legislativo ha sido fundamental para el boom de los derechos de televisión. La entrada en vigor en la temporada 2016/2017 ya disparó los ingresos por ese concepto un 20 por 100 en los equipos de LaLiga esa misma temporada. La clave de este digamos éxito ha sido el cambio de un modelo individualista a un enfoque centralizado donde se ha podido negociar mejor, otra cosa son los criterios de reparto.
Para el caso de LaLiga la venta de derechos nacionales supone en estos momentos del orden de 1.200 millones de euros por temporada y los derechos internacionales 900 millones de euros, con aumentos espectaculares del 15% en los derechos nacionales frente al anterior ciclo trianual, mientras que ha sido nada menos de cerca de un 40% en los derechos internacionales. El reparto es según un fijo del 50% y una parte variable del 25% según resultados deportivos ponderados de las últimas 5 temporadas. El restante 25% es según la denominada implantación social en base a criterios de recaudación, un tercio, y de generación de recursos de comercialización, que ponderan los restantes dos tercios.
Luis Ferruz /Economista y escritor/