A la hora de escoger dentro del catálogo disponible de activos bursátiles, invertir en materias primas es una de esas posibilidades que tenemos a nuestro alcance. En este artículo deseamos contarte cómo puedes invertir en materias primas con seguridad, las razones por las que hacerlo y cuáles son sus riesgos asociados.
¿Por qué invertir en materias primas?
Una materia prima es un producto sin procesar que debe ser homogeneizado para que pueda introducirse dentro de los mercados. Esto da como resultado una materia prima en concreto. Pongamos por ejemplo el caso del acero, que puede comprarse al mismo precio en cualquier parte del mundo.
Invertir en materias primas supone hacerlo en un mercado ciertamente complejo, ya que no se trata de inversiones ciertamente aseguradas. El típico caso del oro, considerado como valor refugio, siempre termina revalorizándose, pero posiblemente no cuando nos interesa.
Por tanto, las materias primas no son un tipo de inversión pensado para cualquiera. Sobre todo, para aquellos que deseen unos resultados prácticamente inmediatos. Aprovechar los momentos cíclicos de precios bajos para obtener un beneficio futuro debe ser lo que te mueva a invertir en materias primas.
Y es que la razón principal por la que un inversor puede decidir diversificar su cartera introduciendo materias primas es porque tiene los suficientes fundamentos para pensar que va a subir, ya sea por el ciclo económico, por aspectos fundamentales o conflictos geopolíticos, como fue (este último) el caso de la inversión en petróleo.
Riesgos de invertir en materias primas
Desconocimiento
Nosotros, como inversores, somos los que determinamos el riesgo que vamos a asumir a la hora de invertir en materias primas. En este caso, el principal riesgo que se asume es común a otro tipo de valores, el desconocimiento que se tiene sobre ellos. Quizás no haga falta ser un experto para invertir en materias primas, pero sí saber lo que se tiene entre manos y cuál podrá ser su futura evolución.
De hecho, en muchas ocasiones, invertir en materias primas se realiza a través de futuros (que los veremos más adelante), unos activos que son ciertamente complejos.
Volatilidad
Sin embargo, quitando el factor del desconocimiento, el principal riesgo de invertir en materias primas es que estos productos cuentan con una volatilidad alta.
Basta algún cambio geopolítico, y los hechos demuestran que pueden sucederse rápidamente, para que haya un movimiento que tome con el pie cambiado a algún inversor y no sepa actuar a tiempo.
Activos especulativos
Por otro lado, son unos productos altamente especulativos y que, para los inversores cortoplacistas, son un instrumento para obtener mucho beneficio en poco tiempo, debido al apalancamiento.
En consecuencia, este hecho, podría suponer altos riesgos para el inversor medio que no goza de tanto tiempo y conocimientos para introducirse en un mercado complejo.
¿Qué materias primas se pueden negociar en bolsa?
La bolsa ofrece una buena variedad de materias primas con las que poder negociar. Antes de introducirte más de lleno en este mundo, debes conocer cuáles son las principales materias primas en las que se puede invertir.
Metales preciosos
Generalmente, hablamos de oro, plata, platino, paladio o diamantes. Su valor viene determinado por su escasez, y todos ellos cuentan con la denominación genérica de valores refugio. Quizás no tengamos altas rentabilidades, pero no cabe duda de que son fáciles de vender y proporcionan una liquidez inmediata. Quien guarda algún metal precioso y necesita convertirlo en dinero fiduciario sabe que solamente debe vender para convertirlo, y que lo hará inmediatamente.
👉 Más información: ¿Cómo invertir en metales preciosos desde España?
Materias energéticas
Se trata principalmente de gas natural, carbón, gasolina, petróleo y sus productos derivados. También se ha introducido en la ecuación el sector de las energías renovables, en las que se puede invertir a través de las empresas que las explotan.
La nueva revolución verde puede suponer un interesante estímulo a la hora de invertir en materias primas.
Dejo una serie de artículos más específicos sobre como estar expuesto a cada uno de estas materias primas energéticas:
Metales industriales
Aquí tenemos que hablar de metales como el litio, el hierro, el zinc, el cobre o el acero, que son fundamentales para el funcionamiento del tejido industrial. Son materias primas muy importantes para el desarrollo del ser humano y de la industria.
Para más información, puedes acudir a nuestro artículo de como invertir en metales.
Agricultura
Cuando hablamos de invertir en agricultura, no son pocos los campos que podemos encontrar, entre ellos el trigo, la soja, café, los piensos, el algodón o los lotes de cabezas de ganado, entre otros muchos.
Además, en esta clase mercados existen diferentes formas de invertir, desde acciones de empresas, hasta ETFs o los propios derivados, con especial atención a los futuros, que originalmente se crearon para reducir la volatilidad en el precio de las cosechas.
👉 Más información: Cómo invertir en agricultura
Energías renovables.
Otro segmento que se ha puesto muy de moda en los últimos años, sobre todo, a raíz de la escasez de materias primas tras el inicio del conflicto en Ucrania, es la inversión sostenible en energías renovables.
De esta forma, dentro de las empresas con criterios ESG podemos invertir en energías renovables como pueden ser:
- Hidrógeno verde
- Agua
- Energía solar
- Energía eólica eólica
Grupo | Materia Prima |
Metales preciosos | Oro, plata, platino y paladio |
Metales industriales | Acero, cobre, hierro... |
Commodities agrícolas | Azúcar, granos, algodón... |
Energía | Petróleo, gas natural... |
Productos perecederos | Soja, trigo, maiz... |
¿Cuáles son las 7 materias primas más cotizadas en bolsa?
Sin embargo, no todas las materias primas tienen el mismo tipo de interés. Estas son las 7 que mejor cotizan y, por tanto, aquellas en las que la inversión podría ser considerada como más interesante por algunos.
El crudo Brent
Originario del Mar del Norte, se caracteriza por ser un producto liviano y que además es el petróleo de referencia en Europa. Dadas sus condiciones, es el producto ideal para fabricar gasolina. Como curiosidad, hay que destacar que es un tipo de crudo que se extrae del océano, mediante una técnica llamada fracking.
El acero
Es la fusión en caliente de hierro y de carbono. Omnipresente dentro del mundo industrial, el acero es una de las materias primas más interesantes a la hora de invertir.
Posee la cualidad de poder continuamente sin perder propiedades, y se utiliza en prácticamente todo tipo de instalaciones industriales, además del sector urbanístico. China lidera la producción mundial de acero, manufacturando nueve veces más que toda la Unión Europea.
El crudo WTI
Se trata del petróleo cuyas siglas se refieren a West Texas Intermediate, producido en Norteamérica.
Este petróleo, así como el Brent, son los que fijan el precio del resto de combustibles a nivel mundial. La producción de este tipo de crudo se mantuvo muy estable durante décadas hasta principios de 2020.
La soja
Llamada por muchos como el cereal del futuro. Su demanda mundial es muy alta, lo que lleva a que grandes extensiones de territorio americano estén produciendo esta materia prima. Brasil, Estados Unidos y Argentina son los principales productores del mundo de soja. Como contraprestación negativa, gran parte de la superficie amazónica y lugares boscosos de Argentina están siendo arrasados para cultivar soja.
De ella se extraen multitud de subproductos, incluidas la harina, la leche o el aceite. Es también un componente de los piensos de alimentación animal.
El hierro
La importancia de este metal es tan grande que dio nombre a un periodo de la prehistoria. El hierro es una de las materias primas por excelencia, elemento fundamental del acero y base para fabricar una enorme variedad de productos. El mayor productor de hierro del mundo es Australia, con 900 millones de toneladas métricas al año.
El maíz
Es el grano más cultivado del mundo. Del maíz se puede manufacturar gran cantidad de sus productos, ocurre lo mismo que con la soja. De él también se pueden extraer combustibles vegetales, destinados a liderar una nueva revolución ante el petróleo. Estados Unidos, seguidos por Brasil y China, conforman el podio de países productores de maíz.
El oro
Quizás nos encontremos ante el producto estrella de las materias primas.
Se trata de un metal precioso caracterizado por su escasez y que puede comprarse en formato digital para negociar con él.
👉 Descubre en el siguiente artículo, otros muchos activos de inversión: ¿Dónde invertir en 2023?
¿Cómo invertir en materias primas?
Invertir en materias primas es algo que puede realizarse de diversas maneras. Estas son las principales formas de inversión en cuanto a materias primas más habituales.
Invertir en materias primas mediante exposición física.
Era la manera tradicional de inversión hasta la aparición de los mercados bursátiles, y sobre todo, de los contratos de futuros. Consiste en comprar una materia prima y almacenarla. Se trata de una acción común para cierto tipo de productos, aquellos en los que el paso del tiempo no implique un deterioro, por ejemplo, los metales preciosos.
Sin embargo, existe un problema asociado a invertir mediante exposición física.
Tener oro en casa no es una opción muy recomendable, a no ser que lo guardemos dentro de una caja de seguridad.
En el caso de que lo custodiemos en la cámara acorazada de un banco, habremos de pagar otra serie de gastos. Invertir en materias primas mediante exposición física quizá se puede hacer con este tipo de metales, pero no con productos perecederos como pueden ser el maíz, el azúcar o las cabezas de ganado, que implican también un problema de logística y almacenaje, además del coste económico.
Invertir en materias primas con acciones
Se trata de una de las maneras más sencillas de invertir, ya que lo hacemos mediante la participación de empresas relacionadas con las materias primas.
Podemos exponer el caso de una azucarera o de una empresa que se dedique a la transformación de crudo. Si el precio de la materia prima sube, evidentemente también lo harán el de las acciones de la empresa en la cual estamos participando.
Es una forma muy común de invertir en materias primas, por su comodidad y porque podemos tener bajo control los precios.
Además, tenemos acceso a prácticamente cualquier mercado que opere con materias primas, pudiendo elegir aquella que sea de nuestro interés.
Supone un avance considerable con respecto a la inversión de materias primas por disposición, que en la actualidad queda prácticamente limitada a metales preciosos, y no es conveniente en muchísimos casos.
Invertir en materias primas mediante contratos de Futuros
Finalizamos con otra de las maneras de invertir en materias primas.
Un contrato de futuros es aquel en el que los inversores van a llegar a un acuerdo para realizar una transacción con una cantidad determinada de una materia prima a un precio concreto y en una fecha futura.
El precio de este tipo de contratos se basa, de manera general, en el precio puntual del activo subyacente. Pero hay diversos factores que determinarán el precio final.
Hablamos del tiempo que transcurre hasta que se entrega, el interés por los propios costes de almacenamiento. Aquí el beneficio dependerá del lado en el que caiga la predicción, ya sea para el comprador o el vendedor.
En el caso del vendedor, va a obtener un beneficio si el precio del activo subyacente ha disminuido a la fecha de vencimiento.
Por el contrario, el comprador obtendrá un rendimiento si ese valor ha aumentado en la fecha acordada.
Invertir en materias primas a través de ETFs
Los fondos cotizados o ETFs se han convertido en una manera de inversión muy interesante. Estos permiten la adquisición de activos que replican algún índice que nos interese, y de hecho, hay una gran variedad de ETFs que tienen relación con las materias primas.
Aquí no se negocia con acciones, sino por futuros y otros derivados, además de contratos específicos, que tienen el respaldo de esas materias primas en formato físico. Su objetivo es replicar a una materia prima concreta, o bien, algún índice específico.
Conviene hacer la diferencia entre sí está replicando a una materia prima en concreto, como el oro, o a un grupo de materias primas. Las réplicas pueden ser tanto físicas como sintéticas.
Los 10 ETFs sobre materias primas
ETFs |
Ticker |
ISIN |
BNP Paribas Easy Energy & Metals |
GSDE |
LU1291109616 |
Invesco Bloomberg Commodity UCITS |
CMOD |
IE00BD6FTQ80 |
iShares Diversified Commodity Swap |
SXRS |
IE00BDFL4P12 |
Invesco Bloomberg Commodity |
XAAG |
IE00BYXYX521 |
Invesco Commodity Composite |
LGCF |
IE00B4TXPP71 |
L&G Longer Dated All Commodities |
ETL2 |
IE00B4WPHX27 |
iShares Bloomberg Roll Select |
IS39 |
IE00BZ1NCS44 |
iShares Physical Gold ETC |
PPFB |
IE00B4ND3602 |
Invesco Physical Palladium |
8PSC |
IE00B4LJS984 |
Invesco Physical Platinum
|
8PSA |
IE00B40QP990 |
Invertir en materias primas mediante Exchange Traded Commodity (ETCs)
Los Exchange Traded Commodity o ETCs son vehículos de inversión listados en bolsa y negociados como las acciones que permiten al inversor ganar exposición a las materias primas de forma individual, sectorial o global.
Dichas materias primas negociadas en bolsa permiten beneficiarse de todas las cualidades que he expuesto anteriormente teniendo en cuenta ciertos riesgos semejantes a los contratos de futuros, ya que dichos ETCs replican índices cuyos constituyentes son futuros de las materias primas en cuestión.
A continuación exponemos unas tablas con los retornos acumulados para diferentes periodos de tiempo, las correlaciones con los principales índices benchmark de acciones, volatilidades y ratio de Sharpe para cada una de las materias primas utilizando como referencia los ETCs de ETF Securities.
Metales preciosos
Metales industriales
Agricultura
Energía
En este artículo te hemos acompañado en la aventura de invertir en materias primas, ya sea a través de acciones, futuros o ETFs. Sin embargo, tanto para materias primas como para cualquier tipo de producto objeto de inversión, la cautela siempre ha de ser nuestra principal característica.
Si desconocemos el funcionamiento de los mercados bursátiles, una plataforma que tenga una cuenta demo es la herramienta perfecta. Nos permite invertir con datos reales, pero con dinero ficticio. Por tanto, no existe ningún tipo de riesgo para nosotros, y es una gran escuela que vamos a tener a nuestra disposición.