Nuestra visión de los mercados es que todavía hay nubarrones en el horizonte, de manera que no tenemos todavía una situación clara y despejada que vaya a permitir alzas sostenidas en las bolsas durante los próximos meses. Y esta situación puede cambiar, pero todavía no es el caso tanto desde un punto de vista macro como desde un punto de vista de estructura de precios. Veamos cada uno de estos factores.
Si bien las bolsas han subido con contundencia desde la pasada Navidad, gracias a los avances en las negociaciones comerciales entre EEUU y China así como a los mensajes de los Bancos Centrales de EEUU y Europa, no es menos cierto que estamos viendo datos MACRO que son especialmente preocupantes, tales como la drástica revisión a la baja de las perspectivas de crecimiento de la zona Euro (pasando del 1,7% al 1,1%), una caída del 20% en las exportaciones de China (la mayor de los últimos 3 años) o el freno en seco de los datos de empleo de EEUU. Todo esto está generando una preocupación creciente entre los inversores, ya que pueden ser una alarma de que la ralentización del crecimiento es mayor de lo esperado. Como consecuencia de lo anterior, los Bancos Centrales han tomado posiciones, unos ralentizando la subida de tipos en EEUU o reduciendo el ritmo de reducción del balance de la Fed, y otros lanzando nuevas medidas de estímulo de crecimiento e inyecciones de liquidez a los bancos (BCE).
Por otro lado, las fuertes caídas sufridas en las bolsas en el último trimestre 2018, dejaron ciertos daños en las estructuras de precios, que sólo podremos subsanar si volvemos a conseguir nuevos máximos en las series de precios bursátiles. Sin embargo, nosotros no vemos que los índices vayan a tener fuerzas suficientes para seguir escalando posiciones de forma sostenida. Más bien, pensamos lo contrario. Por ejemplo, la zona de los 11.800 puntos del DAX son una fuerte resistencia, que equivalen al pull-back que está realizando el índice a la línea clavicular de la formación HCH (hombro-cabeza-hombro) dibujada durante mayo17-sept18; por otra parte, la zona de los 26.300 para el DJI o los 8.680 para el DJ Composite, son fuertes resistencias que no se consiguen superar.
Todo esto nos invita a extremar las precauciones por el momento, de manera que seguimos con una exposición nula a las BOLSAS: ya habrá tiempo de tomar de nuevo posiciones en bolsa si el escenario cambia!. Pensamos que los recorridos al alza son limitados, pero los riesgos a la baja son elevados, ya que cualquier noticia negativa en lo que se refiere a la marcha de las negociaciones EEUU-China, el Brexit o sorpresas inesperadas de los Bancos Centrales, puede hacer girar los precios a la baja de una forma contundente.
Por esta razón, no sólo mantenemos una alta exposición a la VOLATILIDAD (que sube cuando las bolsas bajan) sino que la hemos completado al máximo por cartera, ya que hemos quitado la inversión en DIVISA que teníamos con la LIBRA, la cual está dando bandazos por el Brexit y hasta dentro de unas semanas/meses no vamos a ver una dirección clara en su evolución.
Dejamos el detalle de la COMPOSICIÓN DE NUESTRAS CARTERAS DE INVERSIÓN: