Para todos aquellos que nos encanta la inversión y hemos nacido en España queramos o no uno de los referentes siempre será Francisco García Paramés. En algunas de sus conferencias y/o entrevistas siempre decía aquello que no hace falta hacer complicados modelos financieros para obtener buenos resultados, simplemente nos teníamos que pensar. Hace un tiempo leía un artículo que hablaba sobre los “First principles” o primeros principios que viene a ser como una especie de estrategias que se puede emplear para analizar problemas complicados y generar soluciones originales. También podría ser el mejor enfoque para aprender a pensar por sí mismo. Esta forma de pensar ha sido llevado a cabo por personajes tan relevantes como Aristóteles y Johannes Gutenberg y en la actualidad por el propietario de Tesla, Elon Musk. Sinceramente todo esto de aprender a pensar mejor me parece fascinante y sin duda nos dará ese pensamiento out of the box que nos hará marcar la diferencia como inversores.
Es más importante razonar desde los primeros principios que por la analogía. La manera normal en que conducimos nuestras vidas es razonar por analogía. Estamos haciendo esto porque es como algo más que se hizo o es como lo hacen otras personas. Es mentalmente fácil razonar por analogía en lugar de por nuestros queridos primeros principios. Estos son la manera física de mirar el mundo. Lo que realmente significa es que reducen las cosas a las verdades más fundamentales y luego razonan desde allí. Eso requiere mucha más energía mental.
Un ejemplo de Elon Musk decía: alguien podría decir que los paquetes de baterías son realmente caros y así es como siempre lo serán porque así es como siempre han sido en el pasado. ¡No! Eso es bastante estúpido. Si aplica ese razonamiento (analogía) a algo nuevo, entonces no podrá llegar a esa cosa nueva.
Para las baterías, la gente dice que, históricamente, ha costado 600 dólares por kilovatio hora y no va a ser mucho mejor que eso en el futuro. El pensamiento de los primeros principios diría, ¿cuál es el precio de mercado de los componentes básicos de la batería? Tiene carbono, níquel, aluminio y algunos polímeros para la separación. Por lo tanto, desglose en términos materiales y pregunte: "Si compramos eso en el mercado de metales de Londres, ¿cuánto costará cada una de esas cosas?" ¡Oh! Es como $ 80 por kilovatio hora. Claramente, necesita formas inteligentes de tomar esos materiales y combinarlos en la forma de batería y puede tener baterías mucho más baratas de lo que nadie se imagina.
Básicamente, los primeros principios son los orígenes o los conceptos principales que no pueden deducirse de ninguna otra cosa. Son las suposiciones fundamentales que sabemos que son verdaderas. Así como por ejemplo la inversión en valor es tremendamente sencilla de explicar es muy complicada de llevar a cabo, no por nada en especial sino porque se necesitan muchas horas de análisis que nos permitan conocer esos fundamentales de una compañía que nos permita valorar con la mayor exactitud posible su potencial.
Practicar el pensamiento de los primeros principios no es tan fácil como explicarlo. Como dijo Musk, es mentalmente agotador. Pensar desde los primeros principios es endiabladamente difícil de practicar. Estos modelos mentales son los principios fundamentales, las grandes ideas, de diferentes campos del conocimiento humano. La mejor manera de lograr la sabiduría, dijo Charlie Munger, es aprender las grandes ideas que subyacen a la realidad, ya lo decíamos en uno de nuestros post sobre los modelos mentales del gran Charlie.
El segundo paso es la recombinación de las piezas que se identificaron en el primer paso. Esta es otra vez una habilidad que solo puede desarrollarse mediante la práctica deliberada. Cualquier idea como una pieza aislada de información no permanece en el cerebro humano por mucho tiempo. Para ser adhesivo, debe estar conectado con otras ideas. Un enrejado es esencialmente una cuadrícula de ideas conectadas entre sí. Estas conexiones son el pegamento que mantiene unidas esas ideas. Si el nuevo conocimiento no encuentra ninguna conexión o relevancia con el conocimiento anterior, pronto será olvidado. Las ideas nuevas no pueden simplemente "almacenarse" como archivos en un armario. Deben conectarse con lo que ya hay allí como piezas de un rompecabezas. A medida que mejora en la búsqueda de conexiones entre ideas aparentemente desconectadas, su músculo de recombinación se fortalece. Alguien con un fuerte músculo de recombinación le resultará fácil practicar el segundo paso del pensamiento de los primeros principios.
Realmente cuando comenzamos a estudiar un campo creemos que tenemos estudiar un millón de cosas pero lo que necesitamos realmente es estudiar los principios básicos, el millón de cosas que creíamos que debíamos de memorizar son simples combinaciones de los principios básicos.
Entonces, ¿cómo este modelo mental ayuda a un inversor a tomar mejores decisiones de inversión? En primer lugar, si está buscando la próxima Apple o la próxima Amazon, estamos pensando por analogía. El uso de analogías es el pensamiento convencional y tiene sus propias limitaciones, especialmente en la inversión, ya que puede hacerte tener una visión ciega. Entonces, usando el pensamiento de los primeros principios, tendríamos que analizar el problema fundamental al que se enfrenta cada inversor: ¿debería invertir en una acción determinada? en sus preguntas constituyentes. ¿Cuáles son esas preguntas constituyentes?. Aquí no vamos a descubrir la pólvora.
-¿Entiendo este negocio? ¿Está en mi círculo de competencia?
-¿Este negocio tiene una ventaja competitiva duradera, un foso?
-¿Gestiona la compañía alguien que es capaz, honesto y cuida de los accionistas minoritarios?
- ¿Puedo estimar el valor del negocio y existe un margen de seguridad suficiente al precio actual?
En cuanto al paso de recombinación, en este contexto, significaría ser inteligente acerca de dar el peso adecuado a cada respuesta. Debería interpretar las respuestas a la luz de algunos otros factores, como el tipo de su cartera de inversiones y su horizonte de inversión. Por ejemplo, ¿maneja una cartera concentrada de menos de diez acciones o tiene una tenencia a diversificar? ¿Está invirtiendo para objetivos financieros específicos dentro de 5-10 años o tiene un horizonte de inversión más largo, digamos de 30 años? Ahora, para responder a las preguntas anteriores, un inversor puede tener que examinar una montaña de otros datos. Por ejemplo, cómo funciona la industria, el panorama competitivo, el desempeño histórico del negocio, la historia de la ejecución por parte del management, el potencial futuro del negocio, etc. Cada uno de estos factores, a su vez, depende de una docena de otros parámetros. Afortunadamente, no es muy difícil obtener respuestas a la mayoría de estas preguntas en estos días, gracias a la tecnología y a Internet. ¿Pero cómo separa la señal del ruido?
No tiene que simplificar todos los problemas hasta el nivel atómico para obtener los beneficios del pensamiento de los primeros principios. Solo necesitas ir uno o dos niveles más profundo que la mayoría de las personas. Diferentes soluciones se presentan en diferentes capas de abstracción.
Al invertir, centrarse en la forma significaría dejarse seducir por los multi-baggers o las últimas modas y estrategias de inversión. Uno podría identificar a diez multi-baggers y aún no tener nada que mostrar si invirtiera solo el 0.5% de su cartera en sus selecciones de esas multi-baggers. La forma de invertir identificando las acciones multi-baggers puede desviar nuestra atención de la función de invertir, capitalizar el dinero a largo plazo.
Hace un tiempo un gestor me contaba su tesis de inversión sobre una de sus principales posiciones. Realmente me interesaba mucho y es lo que tratamos de averiguar en nuestras entrevistas en la vuelta al gráfico. Era una compañía muy cíclica que había cotizado en máximos sobre los 15 euros y que estaba en la parte baja del ciclo y en un proceso de reestructuración. El gestor asumía que perdiendo 2 tercios de su valor valdría 5 euros y cotizaba en torno a 3. Con todo lo anterior, el gestor no dudo en comprar porque veía un margen de seguridad importante. ¿Qué quiero decir con esto?. Una vez conociendo las dinámicas del sector era una hipótesis muy realista y de hecho el resultado de la inversión así lo ha confirmado.
En los negocios pasa lo mismo y si nos cogemos las cartas de Jeff Bezzos a sus accionistas hace 20 años podremos ver claramente sus primeros principios que guiarían su estrategia empresarial. Por un lado, centrarse en el largo haciéndose con la cuota de mercado y por otro enfocado en el cliente en lugar de la competencia. Esto llevó a Amazon a centrarse en cosas que no cambian en lugar de cosas que cambian, por ejemplo, precios bajos, entrega rápida y una selección de productos más amplia.
Es importante ver el conocimiento como una especie de árbol semántico: asegúrese de comprender los principios fundamentales, es decir, el tronco y las ramas grandes, antes de entrar en las hojas / detalles o no hay nada de lo que puedan agarrarse. Esto no lo digo yo, lo dice Elon Musk y sinceramente y pensando por ti mismo seguramente que alguna aplicación práctica le podemos sacar.
Javier Flórez
@FlorezJav