En menos de dos sesiones, sus acciones han caído desde $56,33 hasta $49,44 en estos momentos. Supone un 12,23% de descenso o una pérdida de casi $7.600 millones de capitalización. En el enlace podéis leer el motivo. Básicamente, se han descubierto algunos desfibriladores defectuosos. La FDA calcula que son menos del 1% de los 268.000 implantados. Ante este descubrimiento, la compañía ha pedido a los médicos que dejen de implantarlos. Como podéis ver en el enlace, MDT estima que todo esto va a suponer un descenso máximo de los ventas de $250 millones (esto supone $57,50 millones de beneficio neto) a lo que habría que sumos otros $40 millones por otros motivos como devaluación de inventarios. En total, la compañía ha calculado que en el peor de los casos el coste directo será de $100 millones.
A estos $100 millones habría que sumarle unos cuantos más por daños de imagen que lastrarán sus ventas generales y bastantes más por conflictos legales (seguro que hay algún juicio, indemnizaciones...) Vamos a ponernos en un escenario muy malo. Supongamos que por la imagen reducen sus ventas un 5% del total del año pasado. Serían $615 millones que con un margen neto del 23% supondrían un descenso del beneficio de $141 millones. Por otro lado, tenemos 2.680 desfibriladores defectuosos. Vamos a ponernos bestias y supongamos que todos los que tengan el desfibrilador dañado merecen indemnizaciones de $2 millones. El impacto total de la noticia sobre el beneficio sería: $100 + $141 + $2.680 = $5.601 millones. Supongamos que MDT no está asegurada y que va a pagarlos ella solita.
Con todo esto, el impacto real de la noticia sería de $5.601 millones (en un escenario absolutamente malo) frente a su impacto de $7.600 millones en la cotización. A corto plazo, la caída de estos días no tiene sentido. A largo plazo, teniendo en cuenta que en el pasado ejercicio MDT generó $2.400 millones en Free Cash Flow y que la tasa de crecimiento del FCF durante la última década fue superior al 20% anual, el impacto de la moticia en la empresa a largo plazo (a menos que salgan nuevos datos que la compliquen mucho) es nulo. Así de rotundo: nulo. (Este es el escenario terrible, personalmente me sorprendería si el impacto supera los $500 millones, que ya sería 5 veces más de lo que calcula la propia empresa).
Por tanto, MDT puede ser una buena oportunidad de compra. Recordad que antes de comprar es imprescindible que analicéis vosotros mismos la empresa. Os dejo mi análisis inicial de la compañía de cuando la compré hace unos meses. Es muy posible que, como decíamos hoy en el artículo anterior, estemos ante una de esas empresas que a largo plazo haga crecer nuestro capital poco a poco, año a año.