El rescate de las cajas: una cara canallada política
El rescate de las cajas de ahorro españolas —esas instituciones de crédito que se convirtieron en la banquita personal de todos los partidos políticos y del corrupto empresariado patrio que se arrimaba a su vera— requirió de una inyección directa de capital de 61.500 millones de euros: de ese importe, el Fondo de Garantía de Depósitos de Entidades de Crédito (nutrido por las aportaciones del sistema bancario español durante las décadas previas) aportó 10.200 millones de euros, correspondiendo a los contribuyentes españoles los restantes 51.300 millones. No ha sido la única canallada también se cargaron el sector de bienes tangibles para echar una ayudita al sector.