Algunos estafan hasta en las Notarías

He visto aquí que alguien cuenta que compró un piso al contado y el vendedor, un abogado metido a constructor, sin decirle nada puso una clausula por la que el comprador aceptaba una hipoteca a nombre del vendedor que este cancelaría aunque no dice cuando, pero las hipotecas se cancelan cuando se terminan de pagar si no se dice otra cosa.
Ahora el vendedor no paga la hipoteca que recae sobre el piso del comprador (que pagó al contado).
El comprador no se dio cuenta de esa clausula en la Notaría.
Y es que, aunque parezca increible, la mayoría no se enteran si les cambian una clausula en la Notaría.
Yo he vendido muchos pisos como Agente Inmobiliario, como Gerente de una gran urbanización de una promotora que cotizaba en la Bolsa de Madrid o como promotor por mi cuenta.
Y tengo que decir que a mi me han engañado del mismo modo.
Siempre es un abogado de una de las dos partes que se presenta en la oficina con su cliente y una vez que aceptan ambas partes los términos, les dices en qué Notaría se va a firmar.
Él abogado va a la Notaría en los días desde que tu llevas el borrador hasta que la Escritura está lista. Hace creer al Oficial que es el que está preparando la operación y modifica una clausula.
En el momento de la firma muy pocos se dan cuenta de esta alteración que, obviamente, beneficia a su cliente alterando las condiciones que ya se han pactado.
En los pisos nuevos no cabe este engaño puesto que todas las Escrituras son iguales y el Notario nos conoce, pero en los pisos de segunda mano todo se pacta entre las partes y el Notario no tiene por que saber quien tramita esa Escritura.
Yo tenía un empleado que era abogado y era el que iba a las firmas, a veces iban dos.
A ellos les intentaron hacer esta estafa 2 ó 3 veces pero se dieron cuenta a tiempo.
Pero una vez tuve que ir yo a la Notaría porque tenía un Poder Notarial de un cliente que no vivía en Madrid.
El comprador era un extranjero que dijo ser abogado en su país y que aquí colaboraba en Import-Export en el despacho de un abogado.
A mi me llamó su jefe cuando ya estábamos de acuerdo y me dijo que si se podía firmar en una Notaría cerca de su despacho. Yo le dije que no, que yo tenía un Notario y un modelo de contrato que no iba a cambiar. Yo se que, si a un Notario le llevas una copia de la Escritura hecha por otro y le dices: "quiero una igual que esta" lo más probable es que te diga: "yo se hacer Escrituras, no necesito que me traigas una para que la copie".
Él insistió y me dijo que ese Notario no tenía inconveniente en copiar una Escritura y que bla, bla, bla. El caso es que me convenció.
El día de la firma nos presentamos en la Notaría el comprador y yo con el Poder del vendedor (el abogado jefe no vino).
El Notarío hizo como que leía la Escritura y yo, con tal de terminar pronto y coger el dinero de la comisión, firmé en seguida.
Poco despues me di cuanta de que me habían cambiado una clausula, cambiando unas pocas palabras le habían dado un sentido distinto favorable al comprador.
Cuando la vio mi cliente me echó una bronca munumental, y con razón. Yo quedé como el que lo había engañado a él.
La conclusión es que siempre hay que leer las Escrituras en la Notaría, aunque ya nos la sepamos de memoria.

Sería conveniente que investigaras si las cláusulas cambiadas podrían ser abusivas.
Según el artículo 82 de la Ley General para la Defensa de los Consumidores y Usuarios y otras leyes complementarias se considerarán cláusulas abusivas los siguientes casos:

a) Vinculen el contrato a la voluntad del empresario,
b) Limiten los derechos del consumidor y usuario,
c) Determinen la falta de reciprocidad en el contrato,
d) Impongan al consumidor y usuario garantías desproporcionadas o le impongan indebidamente la carga de la prueba,
e) Resulten desproporcionadas en relación con el perfeccionamiento y ejecución del contrato, o
f) Contravengan las reglas sobre competencia y derecho aplicable.

En caso de resultar ser una cláusula abusiva será anulada de facto según el artículo 83 de la anterior ley.

Un saludo

Los abogados a mi me han hecho perder mucho dinero. En una Agencia Inmobiliaria tratas de poner de acuerdo a las dos partes para que se firme la operación.
Algunas operaciones son muy complicadas por su naturaleza.
Cuando las partes están de acuerdo en lo fundamental tienes que juntarlos para ultimar. En ese momento una de las partes se presenta con su abogado, y a veces las dos.
El empleado encargado de citarlos me decía: "Este viene con su abogado, ya no se firma la operación" y casi siempre acertaba.
El abogado, para justificar los honorarios que le va a cobrar a su cliente, empieza a sacar problemas.
Y cuando cada una de las partes lleva su abogado es seguro que no se firma la operación. Alguna vez he tenido en mi despacho a dos parejas (compradores y vendedores), los abogados de las dos partes y yo. Los abogados han montado tal guirigay discutiendo entre ellos, acusándose uno al otro de no saber nada, y hasta insultándose que he tenido que echarlos a la calle. Ya me habían estropeado la operación ¿para que iba a aguantarlos en mi despacho?
Pero eso de ir a la Notaría a cambiar alguna clausula cuando ya nos hemos puesto de acuerdo, afortunadamente lo han hecho muy pocos. Hace falta una tremenda caradura para hacerlo.

No quiero decir que todos los abogados sean así. La mayoría son serios y saben de lo de hablan.
Pero en una compra-venta entre particulares ¿Qué clase de abogados llevan?
Una iba con la abogada que le llevó su divorcio. Sabrá mucho de derecho de familia paro ¿qué puede saber de derecho inmobiliario?
Otro llevó a un vecino que era el abogado de una empresa. Luego nos enteramos que en la empresa era un administrativo.
Ni siquiera se si todos eran abogados. Yo no le pedí la documentación a ninguno.