Pescanova necesita millones con urgencia
Deloitte, administrador concursal de Pescanova, ha comunicado a la banca acreedora que la firma gallega necesita urgentemente liquidez por importe de entre 50 y 100 millones de euros para hacer frente a su gestión diaria y afrontar sus pagos más inminentes.
Fuentes conocedoras de la reunión que han mantenido la auditora y las entidades han indicado a Europa Press que la banca acreedora estaría dispuesta a facilitar esta línea de crédito, especialmente la española, si bien cada entidad analizará individualmente esta petición.
De hecho, la próxima semana ambas partes se volverán a reunir para tomar una decisión definitiva sobre la situación por la que atraviesa el grupo alimentario, ya que ésta "no podrá esperar mucho".
La banca acreedora de Pescanova se reunió este lunes con Deloitte con el fin de conocer un plan de negocio viable para la compañía gallega, en cuyo capital incluso no descarta su entrada, y abordar la refinanciación de su deuda, que podría acercarse a los 3.500 millones de euros, según han informado a Europa Press en fuentes conocedoras del encuentro.
En concreto, la auditora se ha reunido con las siete entidades que formaron el comité de dirección ('steering committee'), integrado por Novagalicia Banco, Sabadell, Caixabank, Popular, Bankia, Deutsche Bank y Royal Bank of Scotland (RBS), que se mantienen a la espera de conocer los planes de los nuevos gestores de la firma gallega, Senén Touza Touriño y Santiago Hurtado Iglesias, nombrados por Deloitte, para mover 'ficha'.
La banca acreedora de Pescanova, cerca de 50 entidades españolas y extranjeras, ha mostrado en varias ocasiones su apoyo a la continuidad de la firma gallega, y ya había advertido de que sólo se sentaría a negociar la refinanciación de su deuda en el momento que cambiara su equipo gestor, liderado por Manuel Fernández de Sousa, algo que finalmente ha sucedido.
De hecho, no descartaron incluso la concesión de un crédito urgente de entre 50 y 60 millones de euros con el fin de que no hubiera demoras en sus pagos, entre ellos con sus proveedores, y con el objetivo de que la compañía operara con normalidad. La concesión de este nuevo préstamo se enmarcaba dentro del compromiso de la banca de mantener las líneas de financiación a la compañía, tanto a su matriz como a sus filiales.
Deuda por más de 3.000 millones
En concreto, según señalan las mismas fuentes, la deuda bancaria superaría los 3.000 millones de euros, de los cuales unos 1.900 corresponden a su matriz y el resto a filiales, tanto españolas (unos 400 millones) como extranjeras (unos 700 millones). A este importe, se suman además unos 375 millones de euros correspondiente a las emisiones de bonos.
Así, el pasivo de la deuda de la firma gallega, que no incluiría la contraída con la Administración, duplica el importe de lo que figura en su pasivo auditado, 1.522 millones de euros al cierre del tercer trimestre de 2012, de los cuales 459 millones corresponden a acreedores comerciales.
Pescanova aseguró el viernes que cumplirá su obligación legal de formular sus cuentas del ejercicio 2012 hasta un mes después de la presentación del inventario y de la lista de acreedores, en el marco del procedimiento de concurso en el que está inmersa la empresa.
Así lo comunicó a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) la compañía, que afirma que de tal prórroga dará cuenta tanto al juez que ha declarado a la empresa en concurso de acreedores como al registrador mercantil competente.