Pues ciérralo todo si te hace falta. La salud es lo primero. No entiendo nada, pero igual las opciones son demasiado exigentes en tiempo y capital mental. Con una capacidad como la tuya una cuenta se recupera.
Yo hace años había llegado a hacer 50 operaciones intradiarias. No es que me fuera mal, pero ahora saco igual o mejores beneficios con menos esfuerzo y, sobre todo, sin derivados ni apalancamientos, que siempre acaban pillándote o generándote margin calls o taquicardias.
Con toda la que está cayendo, creo que pueden venir curvas para los derivados y las deudas en general. Yo ahora solo trabajo en contado.
Por decir algo, si ayuda... Y el poema de mi firma:
VIDA (Pepe Hierro)
Después de todo, todo ha sido nada,
a pesar de que un día lo fue todo.
Después de nada, o después de todo
supe que todo no era más que nada.
Grito «¡Todo!», y el eco dice «¡Nada!».
Grito «¡Nada!», y el eco dice «¡Todo!».
Ahora sé que la nada lo era todo,
y todo era ceniza de la nada.
No queda nada de lo que fue nada.
(Era ilusión lo que creía todo
y que, en definitiva, era la nada).
Qué más da que la nada fuera nada
si más nada será, después de todo,
después de tanto todo para nada.
.
«Después de nada, o después de todo/ supe que todo no era más que nada.»