Esta Navidad, el regalo estrella en Japón - por recomendación política - va a ser envolver un turtleneck de fondo de armario en un furoshiki y a correr...
Para paliar la factura energética disparatada, jersey de cuello de cisne o un turtleneck jaja...
Mientras tanto los políticos en avión privado y con la calefacción a tope y gastando a todo tren.
Y los beneficiarios del bono social evidentemente sin el avión privado pero también con la calefacción a todo tren
Y el paganini de la fiesta, currando como un burro, inflado a pagar impuestos, pasando frío y con abrigo y bufanda en su casa jaja... vaya país!!!