Viendo la final, un tema que me llamó la atención es la cantidad de aficionados argentinos que había en las gradas.
Superaban con mucha diferencia a la afición francesa.
Siempre he creído que la clase media es un buen termómetro de cómo va el país.
La clase media en Suecia, Noruega, Dinamarca son indicativos que puede haber "muy pocos ricos", pero un porcentaje alto de la población que vive muy bien.
No es precisamente lo que me viene a la mente al pensar en Argentina.
A lo mejor estoy muy equivocado y hay una clase media muy potente económicamente, capaz de desplazarse al otro extremo del mundo para animar a la albiceleste.
No ha sido un Mundial para ir en fugoneta con la mochila acuestas.
Puede que esté muy equivocado y mi visión de la clase media tenga en mente ciertos estereotipos que ya no existen.
Uno se va haciendo mayor y se queda algo anclado en lo antiguo.