Discrepa, lo haces con la Real Academia de la Lengua Española, he he he. Con la iglesia hemos topado, amigo Sancho...
Vamos a ver, soy mujer y como mujer las discriminaciones de género contra la mujer, pues no me pueden gustar por definición. Ni me gustan.
Como persona, tampoco me gusta la discriminación cuando se trata de meterse a saco contra el hombre. Algo que parece no molestar demasiado a las feministas radicales... Mal llamadas feministas.
Supongo que recordarás un anuncio que critiqué duramente, porque mostraba a un hombre poniendo una lavadora y como era muy torpe el pobrecillo, pues no sabía ponerla y tenía que pedir sopitas o lo hacía rematadamente mal.
O aquél otro, que por cierto, se censuró, en el que se veía a una fémina, apoltronada en un tresillo comiendo de un plato no recuerdo si galletas, y desde él, le lanzaba una patada a su chico cuando se acercaba. No recuerdo el motivo del anuncio. Solo sé que me indignó y presenté una queja. Debieron de ser muchas porque el anuncio de marras se eliminó.
Pero como mujer, busco y anhelo la igualdad de género en lo importante, en lo significativo, en lo práctico, en lo que realmente nos afecta a las mujeres como desigualdad de sueldos, desigual comportamiento del jefe al ir a casarte o decidir tener hijos, en fin podría enumerar mil ejemplos de desigualdad social contra la mujer que sigue habiendo...
Y no en las pijadas que no van a ningún sitio y por las cuáles no veo discriminación alguna, como es la estupidez de reiterar hasta el hastío ambos géneros cuando hablamos o escribimos. Estimados y estimadas conciudadanos y conciudadanas, ¡vamos no me toque usted los pies, señor! Además, ¿por qué puñetas nos teníamos que tragar el masculino en primer lugar? ¡¡Discriminación gorda!!
Te digo más: Me parece discriminativo o "torio", no sé ya ahora mismo, ;-), que si una profesión acaba en la vocal "O", por ejemplo, "carpintero", moleste la ausencia del femenino y tengamos que decir también "carpintera" y sin embargo, y ahí es dónde veo la tremenda discriminación, las profesiones u oficios que terminan en "A" como electricista, periodista, equilibrista... no se modifiquen también y lo que es más grave, ¡nos suenen mal en masculino! (Sentimos, en el fondo, que se ridiculiza al hombre y eso lo tenemos censurado en el subconsciente, creado por muchos siglos de machismo léxico). A mi "azafato" me encanta... Ya ves.
¿Qué pasa, que molesta la generalización en "O" pero no en "A"? Es ilógico. Si somos iguales, lo somos para todo.
Así que sería partidaria de ampliar el diccionario sustituyendo las vocales que abarcan ambos géneros -ya sea la "A" o la "O"-, por la "E". Y buscando mi punto de humor... y que no nos falte nunca, por la "U" o por la "I". Vamos, amiguitas feministas, por falta de vocales no va a ser, jajaaaa
Si queremos hablar de un electricisto hombre acabaría en "O" para el singular; si por el contrario, queremos hablar de una electricista mujer terminaría en "A" para el singular y si lo que pretendemos es abarcar ambos géneros con una sola palabra,, pues la igualdad al poder, ni todos "Aes" ni todos "Oes" sino "Es", "Ues" o "Ies".
Por ejemplo: Les electricistes, "electricistus" o "electricistis" salen en manifestación...
Nadie preguntaría si se trata de todo hombres o de todo mujeres, porque el texto habría dejado claro el género con el correspondiente vocablo: "electricistos" de ser todos hombres y ninguna mujer y "electricistas" de ser todo mujeres...
Con el titular mencionado sería obvio que saldrían hombres y mujeres juntos a reclamar sus mismos derechos. Lo dicho, igualdad al poder.
RAE,, te veo cambiando en la próxima edición, o si no, discreparé, como Mua.
Un abrazo a brazas
¡Sed felices!
Si un amigo es de verdad, su amistad perdura en el tiempo y con la distancia.