Puf!, si tú te has rendido mal asunto. Entonces no se, no se....
Yo nunca lo he hecho, según tengo entendido no es otra cosa que restregarle un ajo, "pintarlo" con una mezcla de mitad vino y mitad agua, y al horno. Se supone que debes montarlo sobre una cazuela de barro al revés, con el objeto de que el aire caliente circule por debajo y evitar que esa parte más que asada sea cocida. Pintar cada 20 minutos o cuando se reseque con ese vino+agua. Se supone que con eso es suficiente.
Problema, supongo que por lo pronto el horno. El que yo tengo no es para tirar cohetes (problema de vivir de alquiler, y de haberme movido en 5 años a 3 capitales de provincia). Y evidentemente tiene que salir como Dios manda: dorado color miel por arriba, crujiente como una patata matutano, y por dentro sabroso, jugoso y tierno. Eso es mucho pedir, por eso preguntaba, porque si vosotros lo habéis intentado y no ha sido negocio dejo el experimento.
Respecto a la heladería, pues está en Roma, y según dicen es la mejor de Roma. Yo no sé si es la mejor de Roma pero es muy muy buena, hay cientos de sabores y bueno, es la típica heledaría que no debes dejar de visitar. Está por una de las calles cercanas al Parlamento. De todas formas si alguna vez os cuadra ir a Roma avisar que este amigo Cura sabe un montón de sitios (No se como llevará el voto de castidad, pero el de pobreza ni está ni se le espera) y que antes nos envie un mail con la ruta del colesterol.
Efectivamente, la sidra pierde, le voy metiendo mano cuando cuadra.
Os dejo amigos, voy echar un rato de curre. Chao!
Método, disciplina y tiempo