Pues anímate, Berlín es una ciudad preciosa, muy verde, grandes parques, zonas ajardinadas, zoos e incluso una isla con pavos reales, dónde los niños se lo pasarían genial.
Como gran capital tiene de todo y para todos los gustos, moderno, clásico, matutino, nocturno, ópera, teatro, cines, museos, jardines... ¡de todo!
La gente es muy hospitalaria y si notan que te esfuerzas por hablarles en alemán, ya se deshacen contigo.
Es una ciudad sorprendente, hay que conocerla, hay que vivirla y dejarse seducir por sus muchos encantos.
Un abrazo y ¡feliz día y finde!
Si un amigo es de verdad, su amistad perdura en el tiempo y con la distancia.