Islandia no indemnizará a ahorristas extranjeros por la quiebra de sus bancos.
Así lo ha declarado la EFTA (Tribunal de la Asociación Europea de Libre Comercio)que ha dado la razón a Islandia en su negativa de cubrir las pérdidas de clientes británicos y holandeses que tenían depositados sus ahorros en Icesave, filial en línea del Landsbanki.
Lo sorprendente es que en el dictamen dicha corte rechazó de plano el argumento de la discriminación, prohibida bajo la directiva, con respecto a la acusación de la Autoridad de Supervisión de que Islandia violó esa norma cuando protegió a los ahorradores islandeses con la transferencia de sus depósitos a nuevos bancos solventes pero rechazó al mismo tiempo proteger a los clientes extranjeros.
Ha resurgido el tradicional escepticismo de los islandeses hacia lo comunitario. En aquel momento, la directiva estableció un mínimo de protección de 20.000 euros por ahorrador para los fondos de garantía de depósitos, un importe que fue elevado en 2009 a 100.000 euros.