Presupuestos 2014

Con ánimo de cumplir con las directrices de Bruselas, el Gobierno anuncia los siguientes recortes en los presupuestos de 2014:

Recorte en Sanidad del 100% y en Educación del 85%. Consecuencias:
• Desaparición de la Sanidad Pública y todo tipo de Servicios Sociales. Pero se incide en el ahorro que supone la aceleración de la desaparición de un sector de la sociedad que genera el grueso de los gastos (jubilados). A partir de ahora, quien necesite asistencia médica deberá acudir al sector privado. Se hace hincapié en la justicia del nuevo sistema en el que nadie tiene que pagar por la enfermedad de otro.
• Desaparición de la educación secundaria y las subvenciones a las universidades públicas. La gran ventaja, aparte del ahorro, será la eliminación de un sistema educativo que para lo único que servía es para frustrar a los jóvenes. Únicamente tendrá acceso a la educación secundaria y superior quien pueda pagárselo en el sector privado. Los jóvenes de clase baja-media, entusiasmados por el tiempo libre que se les brinda para jugar a la videoconsola, aplauden la medida. Sólo se mantiene la educación primaria con el objetivo de enseñar a leer, escribir, los colores y matemáticas básicas.

Reforma de las Administraciones Públicas. Ningún funcionario es despedido, pero desaparece el concepto oposición. La tasa de reemplazo será de un trabajador por cada tres funcionarios jubilados o prejubilados. Los criterios de reclutamientos serán potestad del superior al cargo. Consecuencia: Todo empleado público es designado a dedo por políticos.
Las organizaciones sindicales dejan de recibir toda subvención. Deberán vivir de las aportaciones de sus afiliados. Consecuencias: Su completa desaparición y la CEOE dinamita todos los convenios colectivos de trabajadores. Entre los derechos eliminados está el de cobrar estando de baja.

Las partidas para toda obra pública desaparecen de los presupuestos, por lo que el Ministerio de Fomento deja de ser necesario. Consecuencia: cualquier obra pública que quiera realizarse deberá financiarse de forma cooperativa en el ámbito de la autoridad competente, ya sea Comunidad Autónoma, provincia, región, comarca o municipio.

El precio de tener una Justicia pública y universal es insostenible, por lo que se aumentan las tasas judiciales en un 200%. Lo mismo ocurre con la seguridad, con lo cual se crea una tasa para presentar denuncias en comisarías y se crea el canon de tráfico, un impuesto preventivo que se cobra en la expedición y renovación de los permisos de conducir por las posibles infracciones que puedan cometer los ciudadanos y sean no detectadas. Consecuencias: el número de ciudadanos que comienza a tomarse la justicia por su mano va en aumento, así como los que se lanzan a la carretera sin permiso de conducir.

El coste económico que supone la persecución legal del fraude fiscal de las grandes empresas también es un gasto que se decide recortar, por lo que el Gobierno decide suprimir todas las investigaciones en curso y redirigir sus inspecciones hacia los ciudadanos y pymes. Consecuencia: Todas las grandes empresas declaran su sede social en el extranjero y dejan de tributar en España.

Se suprimen las subvenciones al sector primario y secundario. Consecuencias:
• Los sectores agrario, ganadero e industrial prácticamente se extinguen. Sus respectivos ministerios pasan a ser accesorios. La práctica totalidad de la producción de los bienes consumibles pasa a ser exterior. Las importaciones se disparan y las exportaciones brillan por su ausencia.
• En las ciudades, los únicos comercios que sobreviven son los pequeños locales regentados por chinos, cuya expansión no conoce límites, y las grandes superficies. En las pequeñas y medianas localidades el desabastecimiento provoca el desarrollo de una microeconomía de subsistencia y trueque.

Las autovías pasan a ser de peaje, se suprimen las subvenciones al transporte público y al sector del automóvil. Consecuencias:
• La venta de automóviles nuevos se reduce en un 90%, suponiendo la explosión del mercado de vehículos de segunda mano, los talleres clandestinos y los inspectores de ITV corruptos. Las carreteras secundarias sufren un tráfico atroz y por ella sólo circulan automóviles de más de 10 años de antigüedad o de los denominados low-cost. Las autovías sólo son recorridas por vehículos de lujo.
• El precio del transporte público se incrementa en un 150%. Cada vez que sube el precio de la gasolina, sube el precio del billete. Este fenómeno tiene una frecuencia prácticamente mensual.

El presupuesto para Defensa se recorta a la mitad. Todas las misiones en el extranjero se retiran, con lo cual aparece un excedente de personal que debe ser regulado. Consecuencia: Gran parte del personal del Ejército pasa a engrosar las listas del paro.

El mantenimiento del Patrimonio cultural nacional es un gasto prescindible. Se subasta por completo a coleccionistas.

El Banco de España se declara entidad caduca y sinsentido por su inoperancia y gran gasto. De ahora en adelante una comisión formada por miembros del Santander, BBVA y La Caixa vigilará la actividad bancaria. Consecuencia: Se declara prohibido el dinero en efectivo. De ahora en adelante toda transacción monetaria se hará por medio de tarjeta de débito o crédito. Se cierran el 50% de oficinas y se apagan el 90% de los cajeros.

Toda actividad deportiva profesional deficitaria pierde toda subvención. Consecuencia: La práctica totalidad de clubes deportivos españoles adquieren la categoría amateur o pasan a manos privadas. Los que no son Sociedades Anónimas pasan a serlo. Las de pequeña entidad son adquiridas por empresarios o desaparecen. Las más grandes son compradas por jeques árabes o millonarios rusos o chinos. En los casos de las actividades para las que no existe representación de deportistas, se crean concursos televisión para seleccionar famosos que representen a España en los campeonatos internacionales.

Las carteras que mantiene el Gobierno pasan de 13 a 7: Justicia e Interior (se fusionan); Defensa y Asuntos Exteriores (se fusionan), Presidencia y Educación (se fusionan), Alimentación y Seguridad Social (se fusionan), Economía y Competitividad (se fusionan), Hacienda y Administraciones Públicas; y Energía y Turismo (se elimina Industria).
Las otras carteras eliminadas son Fomento; Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad y las partes de Agricultura, Medio Ambiente, Empleo, Cultura y Deporte.

Epílogo: A pesar de las medidas de austeridad aplicadas, incomprensiblemente la economía no remonta, las producción de las empresas se deslocaliza, no surgen emprendedores, no paran de desaparecer pymes, la deuda del país no deja de aumentar, la tasa de paro supera el 50% y la evolución de la emigración es exponencial.
Visto que la financiación exterior está cerrada, para animar a las grandes empresas y fortunas del país a invertir en bonos y letras del Tesoro se crea la amnistía del Tesoro, en la que todo tenedor de deuda pasa a gozar de inmunidad judicial.
La inseguridad y descontento ciudadanos es tal que estalla la “revolución pelaya”, sustentada por numerosos grupos terroristas (también llamados rebeldes) por todo el territorio nacional. Y vuelta Perico al torno.