Las aerolíneas aparcan las coberturas financieras ante la caída del crudo
POR THE WALL STREET JOURNAL
Después de gastar miles de millones de dólares durante décadas para protegerse contra la subida del precio del combustible, cada vez más aerolíneas dejan de lado estas prácticas financieras que les provocaron grandes pérdidas por el desplome de los precios del petróleo.
Cuando los precios del crudo subían, las coberturas financieras ayudaba a las aerolíneas a reducir su exposición a los mayores costes del combustible. No obstante, la celeridad del derrumbe de los precios del petróleo desde mediados de 2014 (alrededor de un 58%) cogió por sorpresa a los operadores aéreos y algunas coberturas pasaron a generar cuantiosas pérdidas.
Delta Air Lines, la segunda mayor aerolínea de Estados Unidos por tráfico, acumuló pérdidas por este concepto por importe 2.300 millones de dólares en 2015. United Continental, la tercera línea aérea de ese país, perdió 960 millones en sus apuestas.
En cambio, la principal aerolínea estadounidense, American Airlines Group, que en 2014 dejó de hacer operaciones de cobertura, una práctica conocida como hedging, pagó mucho menos por combustible que sus competidores. "Las coberturas son un juego arreglado que enriquece a Wall Street", dijo Scott Kirby, el presidente de la aerolínea, en una entrevista.
Replanteamiento de la estrategia
Ahora, buena parte del resto del sector se está replanteando la costosa estrategia de usar complejos instrumentos derivados para garantizar los precios del combustible, el segundo capítulo de coste más alto de las aerolíneas después de la mano de obra.
Algunos operadores han decidido que, en momentos en que los precios del crudo son bajos, los posibles beneficios que proveen las coberturas no justifican los riesgos. Delta y United han señalado que no tienen coberturas para el próximo año.
Aerolíneas estadounidenses más pequeñas como JetBlue Airways o Spirit Airlines, han minimizado sus coberturas, según la información remitida a los reguladores. Incluso en Europa, donde las aerolíneas han sido grandes defensoras del hedging, algunas empresas han moderado sus estrategias.
"No necesitamos cubrir el riesgo como solíamos hacerlo", reconoce Gerry Laderman, director financiero interino de United. "Eso no quiere decir que descartemos el hedging. Buscamos formular (...) una manera distinta de pensar al respecto".
Para realizar coberturas, las aerolíneas firman contratos cuyo valor aumenta de la mano del alza de los precios del petróleo o del combustible. No obstante, también ocurre lo opuesto: el valor de los contratos desciende cuando los precios bajan, generando pérdidas que, en algunos casos, pueden ser considerables, y anulando los beneficios del descenso de los precios del combustible.
¿Repunte transitorio?
La cotización del crudo, que alcanzó un máximo de 147 dólares por barril en 2008, ronda ahora los 41 dólares, después de haber tocado un mínimo de 26 dólares en febrero. Algunos analistas y operadores creen que el reciente repunte es transitorio debido al exceso de suministro en el mercado y estiman que los precios del petróleo seguirán débiles durante un largo tiempo.
Otros factores que influyen en el repliegue del hedging son una ola de megafusiones, recortes de capacidad y el uso de aviones que utilizan el combustible de manera más económica. Estos cambios han apuntalado las finanzas de las aerolíneas y las han vuelto menos vulnerables a los aumentos de los precios del combustible.
American prometió no hacer más coberturas tras la fusión con US Airways. La mayoría de los ejecutivos que ocupan los puestos más altos provienen de US Airways, que abandonó los mercados de futuros en 2008.
Delta, que compró una refinería en 2012 para controlar parte de su suministro, acaba de cerrar su libro de coberturas. La empresa espera registrar pérdidas de entre 100 y 200 millones de dólares en cada uno de los siguientes tres trimestres del año. Aunque Delta sigue comprometida con el hedging, no ha registrado una ganancia por este concepto desde el segundo trimestre de 2014.
La compañía, en todo caso, prevé que la bajada del precio del petróleo reduzca este año los costes del combustible en 3.000 millones de dólares respecto del año pasado, indicó en una entrevista Paul Jacobson, su director financiero.
La posición de hedging de United, que cubre el 17% de su consumo de combustible para este año, registraba una pérdida de 225 millones en enero. La mayor parte del déficit corresponde a coberturas hechas en 2014. La aerolínea no ha añadido coberturas desde julio pasado.
Comprar combustible en dólares
Las aerolíneas europeas, latinoamericanas y asiáticas tienden a depender más de las coberturas puesto que tienen que comprar el combustible en dólares, pero la mayor parte de sus ingresos está denominada en otras monedas que se han depreciado frente a la divisa estadounidense. Andrew Lobbenberg, analista del banco británico HSBC Bank, estima que después de sufrir "enormes" pérdidas el año pasado, algunas de las mayores aerolíneas europeas están reduciendo sus coberturas.
En América Latina, LATAM Airlines Group, que registró una pérdida neta de 219,3 millones de dólares en 2015, se vio favorecida por un descenso de 43,4% en los costes del combustible en el cuarto trimestre, frente a igual lapso del año previo, pero tuvo una pérdida ligada a sus coberturas de 40,5 millones, comparada con una pérdida de 103,8 millones en el cuarto trimestre de 2014.
El grupo, formado tras la fusión de la chilena LAN Airlines y la brasileña TAM, tiene contratos de hedging para cubrir 45% de su consumo estimado de combustible para los próximos 12 meses y anticipa que las pérdidas ocasionadas por las coberturas no excederán los 77 millones de dólares este año.
Avianca Holdings, que anunció una caída del 25,2% en el coste del combustible en 2015, tenía a finales de 2015 coberturas para el 25,4% del volumen de combustible que prevé consumir hasta febrero de 2017. La compañía proyecta que los gastos asociados a las coberturas no superarán 7 millones de dólares por trimestre. Avianca comunicó una pérdida neta de 139,5 millones de dólares en 2015.
Aunque una crisis geopolítica podría elevar rápidamente la cotización del crudo, los expertos subrayan que las aerolíneas con sólidos antecedentes de crédito no tendrán mayores inconvenientes para volver a los mercados de futuros, aunque les podría salir caro.
"Siempre es posible que hagamos hedging en el futuro", señala Bob Fornaro, presidente ejecutivo de Spirit Airlines, que no tiene coberturas para este año.