La concesión tanto de las administraciones de loterías como de los denominados "despachos de apuestas integrales" depende del Ministerio de Economía y Hacienda, a través del Organismo Nacional de Loterías y Apuestas del Estado (Onlae).
El permiso de creación de estos establecimientos se lleva a cabo por concurso público, cuya convocatoria se publica en el BOE.
En los concursos puede participar cualquier español con plena capacidad de obrar y que no forme parte del personal al servicio de las administraciones públicas. Tampoco podrá estar procesado o condenado por delitos de falsedad contra la propiedad, haber sido declarado en estado de quiebra o en concurso de acreedores, ni cesado como titular en otra administración de loterías.
Uno de los gastos más importantes que debe afrontar es la compra o arrendamiento del local, que dependerá de la ubicación y del tamaño del mismo.