No creas que entiendo tanto, vic1969, sólo lo justo para defenderme con lo que a mí me toca. Sobre tus dudas sobre cómo pagar menos o hacer que te retengan menos, te comento unas cosas que también sirven para lo que ha comentado dandynaya.
Tenéis la idea errónea de que, como os devuelven menos al hacer la declaración del IRPF, estáis pagando más impuestos y eso no es así. Dice dandynaya, como conclusión en su comentario, que es mejor no hacer horas extras y ganar menos porque, si trabaja más, le devuelven mucho menos y prefiere que le devuelvan más. Os voy a mostrar lo erróneo de este pensamiento con los números de vic1969:
1) Ejercicio 2013: Ingresos brutos = 18.238 €; Impuestos totales pagados = 516 €; Resultado neto = 17.722 €
2) Ejercicio 2014: Ingresos brutos = 23.595 €; Impuestos totales pagados = 1.719 €; Resultado neto = 21.876 €
En 2014 has tenido un resultado neto 4.154 € superior a 2013, es decir, después de liquidar impuestos. ¿Cómo va a ser mejor (al menos, desde un punto de vista económico; desde otros, ya no sé si compensa echar horas extra o no) la opción de 2013, aunque te hayan devuelto más en la declaración? En 2014 has ganado más dinero, que habrás destinado a lo que hayas considerado mejor o más oportuno. ¿Os dais cuenta que el importe de la devolución de Hacienda no es argumento para decir que es mejor no trabajar más? ¿Dónde está el error de concepto?
El impuesto del IRPF no consta solamente de la declaración que se hace en estos meses de abril a junio. Lo que nos toca pagar depende de lo que ingresemos (o sea, de la base imponible, tanto de la general como de la del ahorro), de las reducciones aplicables con las que se obtienen las bases liquidables, y de los porcentajes de tributación que se apliquen en cada caso a esas bases liquidables para obtener las cuotas íntegras. A estas cuotas se les aplica después otras deducciones adicionales para obtener las cuotas líquidas primero y, tras otras deducciones y compensaciones fiscales, la cuota resultante de la autoliquidación, que es el resultado final de nuestros impuestos.
Pensad en una máquina de picar carne, o en una de esas licuadoras o máquinas de zumos automáticas. En ellas, se mete la materia prima en bruto por un extremo y la máquina devuelve la carne picada o el zumo por otro. Con el IRPF es igual. Se le meten los ingresos (las bases imponibles), le das al botón y te sale una cantidad total a pagar (la cuota de autoliquidación de la declaración). Esas son las cifras realmente importantes a tener en cuenta en el IRPF, no el resultado de la declaración. ¿Y por qué unas veces devuelven más en esta declaración y otras menos? Porque, como detallé en mi mensaje anterior, por el camino, en las retenciones de las nóminas, Hacienda va cobrando una parte a cuenta de ese total que, supuestamente, nos va a salir a pagar en la declaración del año siguiente. En función de lo que nos vayan reteniendo mes a mes, la liquidación final saldrá positiva (o sea, a pagar más) o negativa (a devolver). Por eso, os decía que hay que ver las nóminas de cada mes y controlar tanto lo que vas ingresando como lo que te van reteniendo. Si hay retenciones grandes muy concentradas, como decís, lo tendréis previsto y no os llevaréis sorpresas después.
El mismo concepto anterior es aplicable en el caso contrario. Hay a quien le retienen muy poco, y luego le sale a pagar. ¿Significa eso que paga más que otros? No. Paga según lo que cobre, pero, si no ha pagado antes por el camino, le toca pagar de golpe al hacer la declaración en junio. Sólo hay que ser previsor para no llevarse sustos.
De hecho, si se piensa bien, es preferible este segundo caso. La mayoría de la gente que se encuentra en este supuesto se suele quejar de que le sale a pagar sin pararse a pensar que el hecho de que a uno le devuelvan mucho en la declaración del IRPF es muy malo. ¿Por qué? Porque significa que, durante todo el año, el Estado te ha estado quitando más dinero del que te corresponde pagar, dinero que, seguramente, te venía muy bien para utilizarlo mes a mes, que para eso es tuyo. Luego te lo devuelven, sí, pero por el camino han tenido durante mucho tiempo (al menos, entre 6 meses y un año y medio) un dinero a su disposición totalmente gratis. Cualquier inversor les cobra intereses por prestarles dinero (la famosa prima de riesgo), pero a nosotros Hacienda nos trata como pardillos y nos retiene dinero gratis por la cara. Si yo pudiera escoger, preferiría pagar todo de golpe y haber tenido toda esa cantidad metida en un plazo fijo o en cualquier otra inversión. Eso sí, siendo previsor y no gastándome más de lo que luego sé que me va a tocar pagar. Eso requiere una mínima (o máxima en algún caso) disciplina a la hora de gestionar el dinero.
Sobre la retención mensual que aplican las empresas, solo puedo decir que el asunto está regulado. El modelo 145 de la Agencia Tributaria es el que se usa para decirle a la empresa cuál es la situación personal de cada uno, y, en función de lo que se indique en él, la empresa deber retener lo que toque. Y si no lo hacen bien, se arriesgan a una sanción. Hacienda quiere cobrar mes a mes lo que ella misma estipula, y no quiere que la engañen. Por eso, si lo están haciendo bien, no creo que te puedan rebajar ese 11 % que dices, pero pregúntalo, por si acaso.
Sobre lo del alquiler del piso, si tu casero no lo está declarando, supongo que sabe que es ilegal y que se arriesga a una buena multa si le pillan. Tú asegúrate de si tienes opción a deducción por alquiler, y lo que haga tu casero es su problema. Si tienes derecho y lo pones en la declaración (de hecho, si ese piso de alquiler lo declaras como tu vivienda habitual, tendrás que indicarlo y poner los datos de tu arrendador), le pillarán. No sé la casuística porque no me he topado todavía con ella, pero supongo que Hacienda cruzará tus datos con los suyos y verá que hay discrepancia, y le investigarán, pero que a ti te aplicarán correctamente la deducción, si te corresponde.
Un saludo.