Orange sigue los pasos de Movistar y subirá sus tarifas en febrero
Orange sigue los pasos de Movistar que hace unos días anunció que subiría 5 euros al mes la mayor parte de sus tarifas Fusión a partir de febrero. El operador naranja replica a Telefónica y aumentará entre 2 y 5 euros los precios de sus paquetes convergentes Love desde febrero a cambio de ofrecer más datos en las líneas móviles asociadas.
De esta forma, se reproduce el mismo episodio que sucedió a comienzos de 2016, en que Telefónica anunció una actualización de sus precios de Fusión con un aumento de 3 euros, y Orange reprodujo esa misma subida de 3 euros en sus principales tarifas de servicios convergentes (fijo, móvil, Internet, datos y televisión). Queda por ver si Vodafone, el otro gran operador, sigue los mismos pasos.
La filial de France Telecom en España estrenó sus tarifas Love a finales del pasado mes de noviembre, remozando todo su catálogo de tarifas convergentes. Apenas dos meses después, actualiza al alza sus tarifas con aumentos de entre 2 y 5 euros al mes, según la modalidad.
Las tarifas suben en varias modalidades entre dos y 5 euros. El paquete más básico Love Esencial, que incluye 2 GB de navegación móvil, sube dos euros al mes hasta los 48,95 euros, a cambio de un incremento de 500 megas en la franquicia de datos móvil. El paquete Love Sin límites, que lleva asociado 4 GB de datos móviles, sube también 2 euros hasta los 60,95 euros, a cambio de 2 GB más en el móvil; Love Familia Esencial aumenta 2 euros a cambio de 2 GB adicionales en el superbono de 6 GB y pasa a costar 78,95 euros para conexión de 300 Mb y 66,95 euros para 50 Mb; y la tarifa premium Love Familia sin límites se incrementa 5 euros más al mes a cambio de sumar 6 GB más de datos adicionales en el superbono de 10 GB para pasar a costar 96,95 euros, según publica el portal especializado ADSLZone. Una portavoz de Orange señaló a este diario que desconocía si se iba a producir ese aumento de precios.
El presidente de la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC), José María Marín Quemada, ya ha advertido en varios ocasiones que su organismo iba a estudiar este tipo de prácticas comerciales que las operadoras vienen realizando desde hace dos años de incrementar precios unilateralmente a cambio de mejoras de las prestaciones y los servicios que el cliente no ha solicitado.
Nada es gratis
Los operadores de telecomunicaciones están realizando una fuerte esfuerzo para tender redes de última generación, con una inversión media anual de 4.100 millones de euros en los últimos cuatro años, con un incremento del 26% desde 2012, mientras sus ingresos y resultados se han reducido un 14% y un 48% respectivamente según un estudio de Arthur D. Little. A cambio, España cuenta con la red de fibra óptica más extensa de Europa y una cobertura del 94% del 4G en móvil. Por si fuera poco, se han lanzado a una carrera por los derechos de fútbol y del cine para incluir televisión de pago en sus ofertas convergentes con desembolsos multimillonarios en los últimos años.
Pero nada es gratis. Para rentabilizar esos servicios, tienen que empaquetarlos y forzar a sus clientes a contratar más banda ancha fija, más datos móviles y más televisión. El total de estos paquetes todo en uno superan ya los 10 millones y son, por tanto, la principal fuente de ingresos de los operadores cuya obsesión es incrementar el arpu, el ingreso medio por cliente. De ahí esa práctica de aumentar las prestaciones sin que el cliente lo solicite.
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