España
Parece que trás la gran subida del IBEX, un buen pueñado de participantes han conseguido rentabilidades increíbles superiores al 20%.
El juego comienza a ponerse al rojo vivo con esta volatilidad.
El juego se ha convertido en una ruleta rusa... o casi. El que ha aguantado en liquidez hasta el final y comprado bancos en el momento adecuado para soltarlos a continuación en el intradía ha ganado el juego.
De todos modos es justo reconocer el mérito, aderezado con la necesaria pizca de suerte, del que ha seguido esta estrategia.
Es cierto, con esta volatilidad, hay que estar muy atentos a cualquier movimiento. Pero lo mas duro es que la mayoria del movimiento se produce en las aperturas, movimientos que no se pueden aprovechar.