Re: La barraca
Estamos de acuerdo conque no se debe criticar a alguien que ha estado al borde de la muerte por una labor humanitaria y que se ensañen con ella o su marido que ha pasado también por su calvario.
Pero eso no es óbice para comentar determinadas actuaciones que no han sido muy profesionales en el caso de la enfermera y que han podido propiciar males mayores, como la poca precaución que adoptó cuando salió de cuidar a un enfermo que había fallecido por una enfermedad que aunque es conocida a nivel mundial, en España era una sorpresa y pilló a todos desprevenidos y sin conocer muy bien las consecuencias, ahora todos han aprendido de los errores y aciertos que han realizado tanto los políticos como los sanitarios, como también los medios.
Es indudable que algo, no se sabe y no creo que se sepa, tuvo que ocur5rir en el caso de Teresa, pues si cada enfermo ha sido tratado por un equipo de 50 personas y además están los soldados que trasladaron a los enfermos y nadie mas que Teresa se ha contagiado, algo pasó, no sabemos si fue fortuito o accidental, pero ella tuvo que participar.
Respecto a la rueda de prensa que dio el marido de Teresa, me pareció un montaje excesivo, en primer lugar por aparecer bebiendo agua de un botellín, cuando podía haber usado un vaso, daba una impresión que no se si fue preparada o no, pero no buena y además bebiendo sin parar daba la impresión que estaba muy nervioso "leyendo" lo que le habían escrito y a mi juicio se paso algo cuando indicó que le habían matado su perro sin consideración a una familia sin hijos y me pareció que comparaba un hijo con un perro; tampoco entiendo que querella puede formular contra el consejero de sanidad por haber hecho unas declaraciones poco afortunadas, pero la falta de ética no es delito, creo yo.